Video - Rafael Sal Lari, el nuevo abogado de Lázaro Báez: ¿quién es este polémico personaje que enfrentó un juicio político?

El hombre de Derecho fue juez de Garantías de San Isidro y en el año 2012 vivió un dudoso acontecimiento, cuando enfrentó un jury por mal desempeño y fue suspendido de su cargo por 16 meses.

Sal Lari dictó la excarcelación de un delincuente, quien reincidió y participó del asesinato del ingeniero Carlos Regis en San Isidro, en el año 2010. Entonces, fue denunciado por la Asociación Civil Madres del Dolor.

En la presentación fueron brindados, a modo de prueba, diez casos. La Comisión Bicameral promovió la acusación por cuatro, el jurado desestimó tres y decidió llevarlo a juicio por un sólo hecho.

Antecedentes

Uno de los casos resonantes que tuvo el juez fue el maltrato en el Jardín de Infantes Tribilín, en el que otorgó la eximición de prisión de 5 personas sospechadas de maltratar niños.

Fue cuestionado por su actuación en la investigación del millonario asalto contra la sucursal Acassuso del ex Banco Río.

No dio lugar a un pedido de exclusión del hogar a un padre acusado de abuso sexual de su hija de 12 años. Los abusos sucedían desde que la menor tenía 6 años.

En una causa de venta ilegal de drogas, Sal Lari autorizó un allanamiento tres días después del pedido de la fiscalía.

Algunas frases polémicas del abogado:

• "Cuando un ex convicto o detenido excarcelado, mata, la responsabilidad es de la persona que lleva adelante el hecho. Tiene múltiples causas, es una cuestión de prevención, inclusión y reinserción. Está claro que el Poder Judicial forma parte de este conjunto de causas, pero no es la causa principal de la inseguridad. Opera en el tema inseguridad, pero cuando lo hace, llega tarde".

• "En Estados Unidos hay pena de muerte y no deja de haber crímenes. La solución no es la pena".

• Sobre la liberación de Bordón, acusado en el caso Regis: "Si yo pudiera retrotraer las cosas sabiendo lo que iba a pasar, por supuesto que hubiera hecho las cosas para que no sucediera. Sí sentí lo que pasó. Yo vivo a 20 cuadras de la familia Regis. No tengo custodio y auto blindado. Que hayan entrado en la casa de Regis y no en la mía es algo aleatorio. No tengo conductas suicidas ni me siento en una burbuja a decir: `Aplico así el derecho, total a mí no me va a pasar nada´. Si yo me hubiera arrepentido de aplicar la ley, lo que tengo que hacer es dejar de ser juez".