La secretaria de Nisman agregó información y la audiencia terminó en escándalo
La fiscalía le recriminó a Soledad Castro el hecho de haber cambiado su relato, ella rompió en llanto y las querellas la fotografiaron.
La familia de Alberto Nisman se enfrentó a la fiscalía de Viviana Fein en una ajetreada audiencia que duró desde las 10 hasta las 17.30 y debe seguir la semana próxima. El punto de conflicto fue la secretaria de Nisman, quien cambió su relato.
Soledad Castro, una de las últimas personas que vio con vida al fiscal de la UFI-AMIA, dijo que antes no le habían preguntado y por eso no había revelado todo lo que sabía. La fiscal lamentó que la testigo no hubiera dado (en sus declaraciones anteriores) todos los satos que conocía. Fein le preguntó a Castro si le habían cambiado la declaración o no.
Castro se puso a llorar y la querella empezó a fotografiarla. Castro contó cómo trabajó en la denuncia contra la presidenta Cristina Kirchner y que le había dado trabajo (tareas para hacer) el domingo y los días siguientes.