¿Quién es Santiago Corradori, el financista de Lázaro Báez ligado a Julio De Vido?
La declaración de Fariña lo involucró como enlace del empresario con las cuentas abiertas en los bancos de Suiza y España.
Tras dos semanas de sus dichos ante la Justicia, Leonardo Fariña envuelve a más gente cada día. El valijero K volvió a agitar la causa con la mención de los bancos a los que Lázaro Báez giraba el dinero y de las financieras que funcionaban como enlace. De las nueve agencias de bolsa, destaca un nombre: el de Santiago Corradori.
Corradori sería una persona muy cercana al ex ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, según cuentan los demás operarios de las finanzas que ayudaban a Báez a desviar el dinero mal habido, cuenta La Nación. El platense de 59 años ocupó un cargo como gerente administrativo en el Enargas durante la gestión y bajo el control de De Vido.
Este agente de bolsa fue presidente de la compañía Argas Argentina hasta 2010 y algunos financistas lo señalan como uno de los responsables del desencadenamiento del dólar paralelo en 2011 al haber sido uno de los cambistas que intentó girar 100 millones de dólares al exterior.
No sólo eso, sino que también está sospechado de desviar dinero a España, a partir de la sociedad "Samber & Antares", con la que acumuló 33 millones de euros en pocos meses hasta su liquidación en 2012.
La historia del financista de Báez no se agota en desvíos a Europa ni en relaciones estrechas con el sospechado De Vido, sino que también figura en los tan mentados Panamá Papers. Corradori aparece la creación de la sociedad Hauser Trading (Panamá), el 30 de mayo de 2002, a través del estudio uruguayo de Juan Pedro Damiani.
Desde Mossack Fonseca, firma que permitió la fundación de la sociedad offshore, afirmaron que Corradori colocó en la titularidad a cinco panameños, lo que ilustra su poder sobre la compañía y la necesidad de colocar testaferros.
La Justicia continuará con sus investigaciones y seguramente analizará con detenimiento el rol de Corradori para llegar de una vez con todas a la punta del ovillo de la ruta del dinero K.