Los Báez en la cuerda floja: la UIF descubrió otro desvío de $148 millones que complica más a Lázaro y a sus hijos
La UIF informó que el dueño Austral Construcciones transfirió, a través de cuevas, la suma a las firmas dirigidas por sus hijos.
Los datos, agrupados en los cinco reportes de operaciones sospechosas (ROS), revelan que el elevado monto fue derivado a las empresas afines al grupo Báez para evitar su depósito en el Banco Nación.
La principal firma beneficiada fue M&P SA, que recibió transferencias por $114,6 millones entre febrero y marzo. Lo llamativo es que Martín Báez posee el 50 por ciento de las acciones de M&P, además de ser dueño del directorio de la empresa. Lázaro Báez atesora el 30 por ciento y su hija Luciana figura como una de las apoderadas, según cuenta La Nación.
Evidentemente, el dinero no fue transferido directamente entre empresas, sino que se trató de operaciones mediadas entre firmas denominadas comúnmente "cuevas financieras". Catahu SA, Xhoris SA, Kargen SA, Siembra y Comercialización de Granos SRL y Recasur Argentina SRL aceitaron el traspaso millonario.
Los Báez, a través de M&P, adquirieron un inmueble ubicado en la calle 25 de Mayo 1475, de Río Grande. El edificio, de dos pisos y 727,5 metros cuadrados de superficie, fue comprado en U$S 150.000 en 2006.
Otro de los ROS se emitió luego de que una constructora, Índigo, con domicilio en el barrio EL Carmen, de Río Gallegos y sólo dos años de actividad, libró un cheque por $ 2 millones en diciembre pasado.
Se endosó a Lázaro Báez, que lo pasó a su hija, Luciana, quien cobró $ 1,4 millones por ventanilla del Banco Macro el 12 de enero y transfirió otros $ 500.000 a una cuenta de M&P en la misma entidad bancaria. La desconocida empresa constructora fue considerada "inhallable".
Además de Martín y Luciana, Melina y Leandro Báez también aparecen imputados en la causa y están citados a indagatoria esta semana.