Héctor Timerman finalmente habló sobre la muerte de Nisman: "Buscan desacreditar al Gobierno"
El canciller se defendió de la denuncia del fiscal y volvió a disparar contra el Grupo Clarín.
La intención del canciller Héctor Timerman por mantenerse en el ostracismo absoluto tras la muerte del fiscal Alberto Nisman, comenzó a desvanecerse lentamente, ya que decidió brindar una entrevista a una radio norteamericana. Durante el esperado diálogo, por su importancia para la población, el fiel funcionario de la presidente Cristina Kirchner se justificó por no haberse pronunciado antes, sobre la muerte de Nisman, y contó que "no quiso especular".
En lo que fue una previsible exposición sobre las causas de la muerte del fiscal Alberto Nisman, que mantiene en vilo a la población argentina por su repercusión en los estandartes de la república, el canciller Timerman no dudó en manifestar que, a su entender, "la muerte de Nisman estaba siendo usada para desacreditar al Gobierno", operación a la que, desde su óptica, el Grupo Clarín se había sumado con especial interés.
"Nisman me estaba acusando de algo que por ley yo no podía hacer: retirar las órdenes de arresto de los sospechosos iraníes de poner la bomba en el centro judío. Eso es imposible porque por ley; sólo el juez puede hacerlo", detalló el hombre elegido por la presidente Cristina Fernández representar al país en los asuntos internacionales. Durante su entrevista con la radio norteamericana NPR, el canciller reiteró sus justificaciones ante la denuncia del fiscal.
"Cualquiera que sabe algo acerca del negocio del petróleo sabe que Argentina no puede usar petróleo iraní porque es un petróleo muy pesado y no podemos procesar un petróleo tan pesado", expresó Timerman, una afirmación que guarda estrecha relación con lo expuesto por la Presidente durante la cadena nacional emitida el lunes pasado, transmisión en la que se explayó sobre las características de petróleo iraní para desestimar el interés de la Argentina en ese crudo.
Con respecto la investigación de la voladura del AMIA, producida en 1994, el funcionario del Gobierno opinó: "No puedo decir que los iraníes son culpables, tengo que esperar a que un juez diga quién estuvo detrás de este ataque", y orientó sus más profundas sospechas hacia una "conexión local", a pesar de que, según sus propias palabras "esa posibilidad no fue investigada correctamente".
De este modo, el canciller Héctor Timerman evitó opinar sobre las causas de la muerte del fiscal, un desenlace atiborrado de dudas, aunque no dudó en dejar en claro que, al margen de que se trate de un crimen o un suicidio, el caso se estaría manipulando para "desacreditar" al Gobierno liderado por Cristina Kirchner.