El presidente de la Corte Suprema cuestionó a Alberto Fernández por sus críticas a los jueces
El precandidato presidencial había advertido que los magistrados que investigan a Cristina Kirchner iban a "tener que explicar las barrabasadas que escribieron" en sus fallos.
Cuando todavía estaba en duda si el juicio a Cristina Kirchner por la causa "Vialidad" iba a iniciar a término, el precandidato presidencial Alberto Fernández salió al cruce de los jueces que investigaron causas de corrupción a la exmandataria. "Algún día Ercolini, Bonadio, Irurzun, Hornos y Gemignani van a tener que explicar las barrabasadas que escribieron para cumplir con el poder de turno", advirtió el exjefe de Gabinete.
Casi dos semanas después, el presidente del Máximo Tribunal, Carlos Rosenkrantz, cuestionó, en una entrevista con Perfil, que las afirmaciones de Fernández fueron "un poco ambiguas y no muy felices".
Con respecto a la causa sobre corrupción en la obra pública de Santa Cruz, el magistrado prefirió no ahondar sobre el tema. En especial, sobre el pedido del expediente que habían realizado desde la Corte Suprema, que estuvo a punto de demorar el inicio de la primera audiencia. "Ese tema está pendiente de reasunción por la Corte, por lo que le pido que me conceda no pronunciarme al respecto", contestó. Y aclaró que no le consta que el exjefe de Gabinete K haya sido el intermediario ante el tribunal para lograr esa orden.
En este caso, a Cristina se la acusa de haber favorecido al empresario Lázaro Báez en contratos de obra pública: la Justicia determinó que fueron 51 trabajos con sobreprecios y deficiencias constructivas. Entre 2004 y 2015, se realizaron en la provincia de Santa Cruz 88 obras, de las que 52 fueron derivadas a sus empresas por un total de $46.000 millones.
A pocos días de que comenzara el juicio a la exjefa de Estado, el Máximo Tribunal le había ordenado al Tribunal Federal N°2 el expediente completo para su mayor estudio. Aunque después aclararon que era para fotocopiarlo y que lo devolverían en tiempo y forma para que el proceso no se demorara. Esa decisión llevó la firma de todos los jueces superiores, menos la de Rosenkrantz.
Además de la expresidenta y de Lázaro Báez, son juzgados el exministro de Planificación Julio De Vido, el exsecretario de Obras Públicas José López, Santiago Carlos Kirchner, Nelson Periotti, Abel Fatala, Raúl Daruich, Mauricio Collareda, Héctor Garro, Juan Carlos Villafañe, Raúl Pavesi y José Santibáñez.
Sobre cómo se dan este tipo de disidencias puertas adentro, el magistrado aclaró que muchas veces tienen "desacuerdos importantes", pero que también tienen "muchos acuerdos", que les permite trabajar. "Todos sabemos que somos parte de un colectivo y que el funcionamiento y la reputación del colectivo depende de cada uno de nosotros", subrayó en el reportaje.
A su vez, Rosenkrantz se refirió a su discusión con Ricardo Lorenzetti, en el momento que lo asignaron como el nuevo presidente de la Corte y minimizó esa diferencia. "Era sobre cuál era el modo correcto de proceder en la transición. El resultado fue producto de nuestra exacerbada emocionalidad, pero lo doy por superado", concluyó.