Yanina Zilli: "Este año vuelvo con todo"
Alejada del medio desde hace bastante tiempo, Yanina Zilli está dispuesta a volver y asegura en una charla exclusiva con DIARIOVELOZ.COM que si Ricardo Fort la convoca para el teatro iría con gusto.
Días pasados Moria Casán festejó el cumpleaños rodeada de amigas del medio y sorprendió la presencia de Yanina Zilli, de quien no se sabía nada desde hacía bastante tiempo. “Con Moria somos amigas desde que trabajamos juntas con Nito y no nos veíamos hacía rato. Hace poco fuimos a cenar con nuestras parejas y me convenció para venir. Ahora siento que me está picando el bichito de regresar al medio”. Dice mientras saluda a viejos amigos y recibe piropos por tener el mismo cuerpo escultural de siempre.
“En esa reunión Gladys Florimonte quedó en llamarme para el verano y estamos en eso. También me animaría a trabajar con Ricardo Fort, a quien le valoro eso de hacer lo que tenga ganas mientras el dinero se lo permita. Se lo ve feliz y disfrutando de ser millonario y eso me parece bien. Si me convoca, me cargo a la niñera y a los críos y me voy a hacer temporada. Él sería la estrella y yo lo acompañaría sin problemas. Por suerte el lomo está diez puntos. Ya no tengo veinte, pero me mantengo bárbara. Lo que no quiero es caer en la desubicación de hacer algo que no puedo. Antes me pasaba sacándome la ropa arriba del escenario, ahora prefiero mostrar otras cosas y cuidarme un poco menos. Si quiero tomar una cervecita lo hago sin preocupación. Lo único que me retoqué en estos últimos tiempos fue sacarme un poquito de lolas”. Cuenta luciendo un escote bien provocativo y sexy.
Hace unos años, Yanina decidió alejarse del medio para buscar una estabilidad económica. “Cuando nació Ornella empecé a trastabillar. Estaba sin pareja y tenía a mi hija a mi cargo. Sentía mucha presión cada vez que terminaba una temporada de teatro para ver si me iban a llamar o no, o si me convocaban a presentaciones o elencos. Me cansé de todo eso y decidí buscar otro rumbo, sin depender del llamado de algún productor. Además era un momento de muchísimas peleas mediáticas y no estaba satisfecha con lo que hacía. Me empecé a plantear que el vedetaje tiene fecha de vencimiento y si bien me divertía y ganaba plata, quería asegurar mi futuro”.
En ese momento se puso en pareja con Sergio y le llegó la posibilidad de conseguir una franquicia para abrir un local de comidas, atendido por sus suegros y acomodar un poco su economía. “Lo tuve un tiempo, pero no me gustaba. Lo terminé cerrando por miedo, después de que un mismo ladrón me entró a robar a dos veces en una semana. Por entones estaba embarazada de Santino. Había fallecido mi mamá unos meses antes y yo estuve al borde de la muerte en el parto. Me sentía mal y terminé desangrada. Me hicieron transfusiones en el Hospital Italiano y me salvaron la vida. Me había explotado todo por dentro y estuve dos días en coma farmacológica. No podía creer que estuviese viva, porque en todo momento estuve conciente y me dí cuenta de todo lo que me pasaba”.