Voto electrónico
Por Matías Mussuto. El autor de la nota hace referencia a las distintas experiencias realizadas en el país a través del voto electrónico. Destaca que en distintas oportunidades también se utilizó en la provincia.
Con motivo de la realización (el pasado 10 de abril) de las elecciones en la provincia de Salta a través de un sistema de voto electrónico, creo que es importante reflexionar sobre el mismo recorriendo algunos antecedentes. Se trató de la experiencia vinculante más importante que se haya hecho hasta ahora en nuestro país, ya que alcanzó a un tercio del electorado en condiciones de votar y su resultado era vinculante para las elecciones que se realizaban ese día. Veamos algunos contenidos en relación al mismo.
¿Qué es el voto electrónico?
Esta pregunta es muy difícil de responder, ya que no todos los autores están absolutamente de acuerdo sobre el punto. Siguiendo a María Inés Tula en su libro "Voto electrónico, las nuevas tecnologías en los procesos electorales", podemos mencionar que por lo menos hay dos respuestas a la pregunta antedicha. Para algunos el "voto electrónico", en un sentido amplio, es utilizado para hacer referencia a las diversas tecnologías de la información empleadas en distintas fases del proceso electoral (registro de ciudadanos, confección de mapas de los distritos electorales, ejercicio del voto en sí mismo, transmisión de los resultados, etc.); para otros, en un sentido más restringido, "la expresión "voto electrónico" remite únicamente al uso de ciertas tecnologías en el acto de votar o en el momento de contar los votos"(Rial).
Antecedentes y experiencias
Debemos destacar la infinidad de antecedentes internacionales de experiencias de voto electrónico en diversas partes del mundo. Particularmente en América Latina no podemos dejar de mencionar a Brasil que se ha convertido en uno de los países más emblemáticos en este sentido, ya que desarrolló su propia tecnología, su propia máquina de votar a través de investigaciones que se extendieron por muchos años. Así las cosas, el pasado 31 de octubre los brasileños eligieron presidente votando 135 millones de ciudadanos a través de un sistema de voto electrónico.
En Argentina han sido numerosas las experiencias realizadas. Sólo vamos a detenernos en las experiencias que se efectuaron en elecciones para cargos públicos electivos y por tanto "vinculantes". Podemos analizar tres casos realizados en nuestro territorio nacional antes de lo ocurrido en Salta: Provincia de Buenos Aires, Ushuaia (Tierra del Fuego) y Marcos Juárez (Córdoba).
1- El voto electrónico en la Séptima Sección electoral de la Provincia de Buenos Aires. Esta experiencia fue la pionera en nuestro país en la introducción del voto electrónico en las elecciones generales de setiembre de 2004, que involucró a los residentes extranjeros en ocho ciudades del interior bonaerense. Asimismo, se llevaron a cabo experiencias simuladas el mismo día de la elección a la salida de los colegios en 20 ciudades.
La experiencia se realizó en el marco de un Convenio firmado con el Superior Tribunal Electoral de Brasil quien facilitó las urnas en calidad de préstamo. Éstas se componían de una urna electrónica y de una microterminal unidas a través de un cable serial de cinco metros de largo. La urna electrónica tenía una pantalla (en la que aparecían los candidatos y partidos políticos) y una botonera con números y tres teclas que permitían confirmar el sufragio (verde), corregirlo (rojo) o votar en blanco (blanco).
Los resultados de la experiencia fueron altamente positivos, teniendo en cuenta que era la primera que se realizaba. Sin embargo hay que tener en cuenta que la misma se realizó en una sección electoral y sólo para los extranjeros residentes, lo cual redujo mucho el universo de aplicación, teniendo en cuenta además que el sufragio para ellos es de carácter facultativo.
2- El voto electrónico en Ushuaia (Tierra del Fuego). La experiencia de Ushuaia tiene un lugar destacado en los antecedentes de voto electrónico en la Argentina, ya que fue la primera en la que participó todo un padrón general de electores, pero también al mismo tiempo se implementó el voto preferencial -que rompe con la famosa lista sábana vertical y horizontal- en los comicios llevados a cabo el 26 de octubre de 2003. Se utilizaron 105 urnas electrónicas, las cuales no tienen botonera sino una pantalla sensible al tacto (touchscreen) que presentaba una reproducción exacta de las boletas electorales tradicionales con la posibilidad de ver a los candidatos.
Como positivo de la experiencia podemos referir la rapidez en la confección de los resultados finales y definitivos del escrutinio (una hora después de los comicios), como también la agilidad en la emisión del voto (se calcula que entre 60 a 90 segundos por persona). Como negativo pueden señalarse fallas en los equipos en la apertura de la urna, errores en el horario de apertura emitido por el equipo, algunas pantallas poco sensibles al tacto y señal sonora de finalización de la emisión del voto de baja audición.
3- El voto electrónico en Marcos Juárez (Córdoba). El domingo 5 de setiembre de 2010, los habitantes de la localidad cordobesa de Marcos Juárez renovaron autoridades municipales a través del sistema de voto electrónico. El escrutinio sirvió como prueba piloto para ver si se amplía o no esta metodología al resto de la provincia en 2011. Esta experiencia tuvo un costo aproximado de 500 mil pesos y el padrón estuvo compuesto por unas 23 mil personas, utilizándose un total de 62 máquinas. Los diarios locales destacaron que gracias a la incorporación de la herramienta informática, a tan sólo una hora del cierre de los comicios se habían escrutado todas las mesas.
Provisto por la empresa Indra, el sistema de votación Point&Vote Eco consiste en una urna electrónica con pantalla táctil, en la que el votante puede ver a los candidatos. Para emitir su sufragio, la persona tiene que identificarse previamente en la mesa electoral, donde se le entrega una tarjeta que lo habilita a usar la máquina. Una vez que opta por un candidato, y se valida la selección, la información se guarda en la memoria y se transmite cuando finalizan los comicios. Antes de retirarse del lugar, devuelve la tarjeta, que quedó inutilizada, al presidente de la mesa.
Experiencias en Mendoza
En nuestra Provincia se han realizado diversas experiencias "no vinculantes" como las que a continuación exponemos.
La primera demostración estuvo a cargo de Telpin, en relación a la elección de tres atributos entre las Reinas departamentales de la Vendimia (ojos más lindos, sonrisa más compradora, expresión más dulce) en marzo de 2004.
La segunda experiencia se realizó entre el 9 y el 10 de julio de 2004 para elegir a la Reina Provincial de la Nieve, con máquinas de la empresa Indra y mediante el sistema touchscreen idénticas a las utilizadas en Ushuaia.
La tercera experiencia se realizó el 29 de agosto de 2004 para elegir a los inspectores de cauce del Departamento General de Irrigación en la localidad de Costa de Araujo (Lavalle). Se utilizó una sola máquina de la empresa Soluciones Electorales y participaron 513 personas.
La última experiencia se realizó en octubre de 2004 respecto de la consulta popular sobre el Plan de Seguridad de la Ciudad de Mendoza (aumento o no de tasas para pago de fuerzas de seguridad).
Conclusiones personales
Creo que después del análisis de las experiencias de voto electrónico, podemos afirmar que es una temática compleja debido a múltiples causas. Entre ellas destacamos la variedad de sistemas y formas, los interrogantes que plantea la famosa "brecha tecnológica" y la forma de lograr un traspaso no traumático del sistema tradicional al sistema de voto electrónico. Al mismo tiempo, según surge de lo antes analizado, también puede ser una herramienta para la transformación de las instituciones democráticas para solucionar la crisis de representatividad, dando transparencia y agilizando los procesos electorales.
Es necesario no caer en la "moda del voto electrónico", esto es, atento a los resultados de lo ocurrido en la provincia de Salta, que ahora todos quieran implementar el sistema como sea y en forma inmediata. Hay que ser responsables, pacientes, estudiosos en el modo de implementación, para que pueda cumplir con los fines a los que tiende y no caer -como sucede habitualmente en nuestro país- en una improvisación que termine anulando la posibilidad de implementarlo. Todo dependerá de la oportunidad, pero sobre todo del sistema elegido y de la decisión política para llegar a su implementación.