Votar a los 16: ¿Quién dice que los jóvenes no están capacitados?
Por Luciano Fryszberg. La Argentina sufre de generalizaciones. Hay un desconocimiento enorme por parte de la mayoría de los políticos y de la sociedad acerca de cómo piensan los chicos.
Por Luciano Fyszberg
@luchofry
lfryszberg@diarioveloz.com
Una pregunta viene rondando en mi cabeza desde que se instaló el tema del voto a partir de los 16 años de edad. ¿Quién dice que los jóvenes no están capacitados para sufragar?
Vivimos constantemente en un blanco o negro. Que bien le vendría a nuestra sociedad dejar de generalizar en todo. A caso ¿los mayores de 18 sí están capacitados para votar?
El otorgar un derecho a los más jóvenes sin obligación es importante. De aplicarse el proyecto de ley, los chicos de 16 y 17 años podrían escoger el rumbo del país. Siempre que me hablen de obtener derechos voy a estar a favor.
El que no tiene la vocación o no se siente preparado, no vota y listo. La escuela es el lugar donde los chicos deben aprenden a pensar. No estoy a favor de la militancia en las colegios pero si a que les enseñen a pensar. Si un chico de 13 años sabe los derechos y obligaciones que tiene como persona es más fácil que llegue a los 16 con la cabeza abierta para poder inclinarse a la hora de sufragar. Claro, los partidos políticos se tienen que deslomar mostrando proyectos, cosa que no pasa.
Me avergüenza escuchar a políticos de años de trabajo decir que el oficialismo, impulsor de la propuesta, elige una clientela más fácil de captar o que los jóvenes se apegan al gobierno nacional porque les da el Fútbol para Todos o, peor, la repugnante comparación de Galtieri mandando a los chicos a Malvinas con un voto democrático.
La mirada inquisidora, despectiva y de censura del mundo adulto sobre los jóvenes es lamentable. Hay un desconocimiento enorme sobre la juventud, tema que debería replantearse la sociedad y los políticos.
¿Qué es ser joven? Una gran definición que escuche fue: "Ser joven es estar en pleno proceso de cambio, plantearse la vida de unos y los otros desde una perspectiva diferente. Uno puede cambiar de gustos, de corte de pelo, de ideología, de carrera, uno puede intentar cambiar el mundo que lo rodea, sin importar la edad que tenga".
La oposición al gobierno nacional da por sentado que, si es que se aprueba la ley, el voto joven irá para el Kircherismo. A caso ¿sus partidos no tienen militancia de los más chicos? Me cuesta pensar que un político, que en la mayoría de los casos militó desde pequeño, le diga a un chico que participa en su partido: "no quiero que votes".
Más o menos, 500 mil son los jóvenes de entre 16 y 18 años que estarían habilitados para votar. Esto quiere decir que si todos los votos van para el Frente para la Victoria le daría un punto más en las elecciones. Como están planteados los comicios para el 2015 pienso que un punto no modifica en lo más absoluto.
Para finalizar quiero dejar unas preguntas. Los políticos que hoy ocupan cargos: ¿No les hubiesen gustado votar a sus 16? ¿La mayoría de los habitantes del país que superan los 18 años están capacitados intelectualmente para sufragar?
Me encantaría que dejen sus opiniones sobre el tema y se arme un debate sin agresiones.
@luchofry
lfryszberg@diarioveloz.com
Una pregunta viene rondando en mi cabeza desde que se instaló el tema del voto a partir de los 16 años de edad. ¿Quién dice que los jóvenes no están capacitados para sufragar?
Vivimos constantemente en un blanco o negro. Que bien le vendría a nuestra sociedad dejar de generalizar en todo. A caso ¿los mayores de 18 sí están capacitados para votar?
El otorgar un derecho a los más jóvenes sin obligación es importante. De aplicarse el proyecto de ley, los chicos de 16 y 17 años podrían escoger el rumbo del país. Siempre que me hablen de obtener derechos voy a estar a favor.
El que no tiene la vocación o no se siente preparado, no vota y listo. La escuela es el lugar donde los chicos deben aprenden a pensar. No estoy a favor de la militancia en las colegios pero si a que les enseñen a pensar. Si un chico de 13 años sabe los derechos y obligaciones que tiene como persona es más fácil que llegue a los 16 con la cabeza abierta para poder inclinarse a la hora de sufragar. Claro, los partidos políticos se tienen que deslomar mostrando proyectos, cosa que no pasa.
Me avergüenza escuchar a políticos de años de trabajo decir que el oficialismo, impulsor de la propuesta, elige una clientela más fácil de captar o que los jóvenes se apegan al gobierno nacional porque les da el Fútbol para Todos o, peor, la repugnante comparación de Galtieri mandando a los chicos a Malvinas con un voto democrático.
La mirada inquisidora, despectiva y de censura del mundo adulto sobre los jóvenes es lamentable. Hay un desconocimiento enorme sobre la juventud, tema que debería replantearse la sociedad y los políticos.
¿Qué es ser joven? Una gran definición que escuche fue: "Ser joven es estar en pleno proceso de cambio, plantearse la vida de unos y los otros desde una perspectiva diferente. Uno puede cambiar de gustos, de corte de pelo, de ideología, de carrera, uno puede intentar cambiar el mundo que lo rodea, sin importar la edad que tenga".
La oposición al gobierno nacional da por sentado que, si es que se aprueba la ley, el voto joven irá para el Kircherismo. A caso ¿sus partidos no tienen militancia de los más chicos? Me cuesta pensar que un político, que en la mayoría de los casos militó desde pequeño, le diga a un chico que participa en su partido: "no quiero que votes".
Más o menos, 500 mil son los jóvenes de entre 16 y 18 años que estarían habilitados para votar. Esto quiere decir que si todos los votos van para el Frente para la Victoria le daría un punto más en las elecciones. Como están planteados los comicios para el 2015 pienso que un punto no modifica en lo más absoluto.
Para finalizar quiero dejar unas preguntas. Los políticos que hoy ocupan cargos: ¿No les hubiesen gustado votar a sus 16? ¿La mayoría de los habitantes del país que superan los 18 años están capacitados intelectualmente para sufragar?
Me encantaría que dejen sus opiniones sobre el tema y se arme un debate sin agresiones.