Violencia escolar en La Pampa
Un adolescente de 14 años protagonizó un violento episodio en su colegio, donde atacó a golpes a una compañera y también agredió a dos docentes, entre ellas la directora del establecimiento, y a dos preceptoras que intentaron frenar su accionar, en una secundaria de la localidad pampeana de Toay.
El incidente se produjo en el Instituto de Enseñanza Secundaria de esa localidad situada cerca de Santa Rosa y terminó cuando una hermana del agresor logró que depusiera su actitud, momento en el que rompió en un prolongado llanto.
Según publicó hoy la prensa local, el hecho se inició el miércoles pasado, cuando la profesora a cargo de la clase retó al alumno y le pidió que dejara de deambular por el aula.
El chico le dijo a la profesora que había compañeras que hacían "cosas peores", en referencia a dos alumnas que jugaban a los naipes en plena clase.
Fue entonces que se produjo una intensa discusión entre una de las alumnas y el adolescente, que de un fuerte intercambio de insultos derivó en que el joven agrediera a puñetazos a la chica.
"Primero la golpeó varias veces con una carpeta y luego le dio un golpe de puño en el rostro", contó la directora de la escuela, Lucía Abdenur.
El joven tomó sus útiles y se retiró del aula, luego de la agresión, y por un momento, pareció que todo había terminado ahí.
Sin embargo, a los pocos minutos, el joven volvió a la escuela gritando que quería seguir la agresión contra su compañera, lo que intentó ser impedido por la profesora, la propia directora y dos preceptoras, y todas ellas terminaron golpeadas.
"En ese momento de confusión y de locura, otra preceptora (Paula Bassi) intenta sacarlo de encima nuestro y lo toma del cinto... sin embargo, luego de un cimbronazos, también la deja por el piso y sale desenfrenado en busca de un caño que él decía que había", relató Abdenur.
La profesora Prieto, que estaba a cargo de la clase, terminó con una herida sangrante en una mano. En ese momento, otras docentes habían salido de la escuela en búsqueda de la hermana del chico, para que intentara calmarlo.
"Ni bien su hermana le dijo que lo que estaba haciendo era una locura, soltó el caño y se puso a llorar... rompió en lágrimas. En ese momento ya estaba la Policía, la ambulancia y la madre del chico en la escuela", explicó la directora a la prensa.
Los dos jóvenes, que fueron descriptos por la docente como "buenos alumnos", hasta el momento no habían vuelto a clase y se les está alcanzando la tarea a la casa.
"Fue un hecho gravísimo... estamos todos con un dolor en el alma", expresó la directora, mientras admitió que se realizó una denuncia policial y se dio intervención al Ministerio de Educación de La Pampa.