Vio a un ladrón entrando a su casa y ella lo empujó por el balcón: “Lo agarré de la campera y lo tiré”

Un delincuente intentó ingresar a una vivienda en Villa Argüello, Berisso, a través de un balcón. La dueña de casa lo descubrió, lo tomó por la campera y lo tiró hacia abajo. Después de caer a la vereda, el delincuente se paró y escapó.

María Paz vivió una noche cargada de adrenalina y miedo este martes por la noche en su casa de Villa Argüello, cuando un delincuente intentó ingresar luego de trepar hasta la planta alta. La joven se encontró con el ladrón cuando intentaba meterse por el balcón que da a la calle.

“Salí al balcón para entrar la ropa que se estaba secando y me encuentro a este chico con la mitad del cuerpo adentro y la otra afuera”, contó María Paz al diario El Día. En un impulso defensivo, lo empujó hacia abajo. 

El hecho tuvo lugar cerca de las 21 horas del martes, en un inmueble de 64 y 126. Era de noche, pero todavía había circulación de personas y vehículos.

La víctima del intento de robo resaltó que en su barrio “los hechos delictivos son frecuentes”, sobre todo el robo de bicicletas. “Se las llevan de las propiedades, están robando muchas”, afirmó.

María Paz señaló que estaba muy asustada: “Una no sabe qué pueden hacer estos tipos”.

La damnificada se mostró sorprendida por el ataque “ya que a esa hora había bastante movimiento de gente en la calle como para que se animara a entrar”.

El ladrón era “flaco, tenía aproximadamente unos 25 o 30 años, vestía campera blanca con rayas azules en la espalda y pantalón negro”, detalló la joven.

Sobre su impulso de empujar al delincuente, María Paz repasó: “Lo que me salió fue increparlo y tirarme encima de él. Lo agarré de la campera y lo tiré para la vereda”.

El joven cayó boca abajo, por lo que María Paz bajó a toda velocidad la escalera para cruzarse con el sujeto. Sin embargo, vio cómo el asaltante se incorporó sin dificultades y huyó corriendo de la escena por la calle 64 en dirección a 127.

“Lo enganché justo queriendo meterse. Creo que se dio un buen golpe, porque cayó boca abajo”, reiteró la víctima. Cuando se pudo recuperar del encontronazo llamó a la Policía, aunque aseguró que “no hicieron nada”.

"La Policía no solo no vino sino que en el segundo llamado me cortaron. Estoy cansada de que en el barrio pasen estas cosas y que nadie haga nada", lamentó.

Algunos vecinos salieron a la vereda al escuchar los ruidos y gritos. En segundos, todo volvió a la normalidad.

La joven compartió su experiencia con vecinos del barrio El Mondongo y les advirtió: “Les dije que tengan cuidado y estén atentos. Sé que por ahí están robando con la misma modalidad, por eso”.

Por otro lado, indicó: “No sé qué esperaba robar porque yo soy estudiante universitaria y no tengo nada de valor en casa, vivo el día a día. Quizás fue al voleo, pero ni bicicleta tengo”, contó María Paz, y concluyó: “Yo traté a mi manera de defenderme e intentar que no entre en mi casa”.

Como el implicado aún permanece prófugo, la víctima aportó datos sobre su aspecto: "Tenía aproximadamente unos 25 años, tez morena, flaco y vestía una campera blanca con rayas azules en la espalda y pantalón negro".