Video - Escándalo en Brasil: manifestantes ultraderechistas invadieron la Cámara de Diputados y fueron salvajemente desalojados
Un movimiento de unas 80 personas a favor de un golpe militar en Brasil invadió por tres horas el recinto.
El acontecimiento ocurrió en paralelo con otro episodio violento ocurrido en medio de la crisis política y económica que vive el país, ya que el Río de Janeiro la policía reprimió una protesta contra el ajuste fiscal ordenado por el gobierno de Michel Temer.
Los manifestantes de Brasilia proclamaron el fin de la democracia y reivindicaron que las Fuerzas Armadas tomaran el poder, dando a conocer además su simpatía por el juez federal Sérgio Moro, famoso por investigar la corrupción en el escándalo de Petrobras.
"Pedí la detención de todos por diversos delitos", dijo el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, quien se negó a negociar con el movimiento, que aprovechó una audiencia pública en comisión para penetrar en el recinto de la cámara baja.
Los manifestantes se congregaron mediante un grupo de WhatsApp aprovechando una reunión de comisión abierta al público sobre un proyecto presentado para ampliar las penas por corrupción en el país.
De los 400 que estaban en los pasillos del Congreso, unos 80 rompieron vidrios y pelearon con la policía legislativa para ingresar al recinto cantando "Viva Sérgio Moro" (el juez del escándalo de Petrobras), "Nuestra bandera jamás será roja" y "Queremos un general en el comando del país".
Decenas de manifestantes subieron a la mesa principal de la cámara baja, que no estaba realizando ninguna sesión y apenas había un puñado de diputados, entre ellos el vicepresidente del cuerpo, Waldir Maranhao.
"Venimos a cerrar el Congreso Nacional y sólo saldremos si el ejército negocia", dijo un empresario de la construcción civil que lidera la protesta, identificado como Jeferson Vieira Lima, según reportó Agencia Estado.
La TV Cámara, el medio oficial de la cámara baja, dejó de transmitir los acontecimientos.
"Está es la semilla del fascismo", dijo el diputado Chico Alencar, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
La protesta surgió en medio del debate sobre las medidas contra la corrupción presentadas por los fiscales de la operación Lava Jato que se trata en comisión.
"No podemos permitir que el parlamento sea víctima de la violencia", dijo el derechista Marcos Rogerio, de Demócratas.
Entre las reivindicaciones del grupo militarlista se encontraba la renuncia del presidente MIchel Temer y la rebaja del salario de los parlamentarios.