Uruguay: Diputados aprobó la despenalización del aborto
La cámara baja del país vecino aprobó el proyecto de ley que le permite a las mujeres interrumpir su embarazo dentro de las primeras 12 semanas. El debate fue reñido y duró al rededor de 14 horas.
La Cámara de Diputados de Uruguay aprobó ayer, minutos antes de la medianoche, el proyecto de ley para despenalizar el aborto durante las primeras doce semanas de embarazo. Ahora la iniciativa pasará a la cámara alta.
La aprobación se logró anoche, luego de un intenso debate que duró alrededor de 14 horas, de hecho la votación fue más que reñida: 50 votos a favor y 49 en contra. La jornada en el Congreso de Urguay tuvo todos los condimentos habidos y por haber.
Un diputado se emocionó en medio de su exposición al contar historias familiares, en los jardines del edificio desfilaron mujeres desnudas y con sus cuerpos pintados, otros legisladores luego de dar su postura se marcharon del recinto y dejaron su banca a los suplentes para el momento del voto, cruces y expresiones fuertes.
Quienes están en contra de la despenalización del aborto, argumentan que se trata de una defensa a la vida, la cual según ellos existe desde el momento de su procreación.
Pero, varios de los legisladores que están a favor del aborto y de que la mujer pueda decidir sobre su cuerpo, tampoco están a favor del proyecto de ley, ya que según ellos, el proyecto "no despenaliza el aborto, sino que suspende la pena e impone condiciones muy exigentes".
"La interrupción del embarazo no será penalizada y no serán aplicables los artículos del Código Penal referidos a este tema, para el caso que la mujer cumpla voluntariamente con los requisitos que se establecen en los artículos siguientes y se realice antes de las 12 semanas de gravidez", dice el proyecto.
La mujer deberá asistir en ese período de tres meses a una institución médica para exponer su situación, para que su embarazo sea interrumpido "legalmente" deberá argumentara situaciones de déficit económico o problemas familiares que pudieran impedir el desarrollo del embarazo y el nacimiento de su hijo.
Una vez realizada esta primer entrevista, el médico deberá juntarse con un equipo interdisciplinario en el plazo de las siguientes 24 horas, compuesto al menos por tres profesionales: un ginecólogo, un especialista en salud psíquica y un asistente social, para evaluar cada caso en particular.
El proyecto ahora se debatirá en la Cámara de Senadores para poder convertirse en Ley.
La aprobación se logró anoche, luego de un intenso debate que duró alrededor de 14 horas, de hecho la votación fue más que reñida: 50 votos a favor y 49 en contra. La jornada en el Congreso de Urguay tuvo todos los condimentos habidos y por haber.
Un diputado se emocionó en medio de su exposición al contar historias familiares, en los jardines del edificio desfilaron mujeres desnudas y con sus cuerpos pintados, otros legisladores luego de dar su postura se marcharon del recinto y dejaron su banca a los suplentes para el momento del voto, cruces y expresiones fuertes.
Quienes están en contra de la despenalización del aborto, argumentan que se trata de una defensa a la vida, la cual según ellos existe desde el momento de su procreación.
Pero, varios de los legisladores que están a favor del aborto y de que la mujer pueda decidir sobre su cuerpo, tampoco están a favor del proyecto de ley, ya que según ellos, el proyecto "no despenaliza el aborto, sino que suspende la pena e impone condiciones muy exigentes".
"La interrupción del embarazo no será penalizada y no serán aplicables los artículos del Código Penal referidos a este tema, para el caso que la mujer cumpla voluntariamente con los requisitos que se establecen en los artículos siguientes y se realice antes de las 12 semanas de gravidez", dice el proyecto.
La mujer deberá asistir en ese período de tres meses a una institución médica para exponer su situación, para que su embarazo sea interrumpido "legalmente" deberá argumentara situaciones de déficit económico o problemas familiares que pudieran impedir el desarrollo del embarazo y el nacimiento de su hijo.
Una vez realizada esta primer entrevista, el médico deberá juntarse con un equipo interdisciplinario en el plazo de las siguientes 24 horas, compuesto al menos por tres profesionales: un ginecólogo, un especialista en salud psíquica y un asistente social, para evaluar cada caso en particular.
El proyecto ahora se debatirá en la Cámara de Senadores para poder convertirse en Ley.