Una valiosa iniciativa de la Universidad local para promover la salud
La decisión de integrantes de seis facultades de la Universidad Nacional de La Plata de generar un espacio público y participativo con la finalidad de promover hábitos de vida saludables, a través de diversas actividades que se concretarán durante tres sábados en la plaza Islas Malvinas, constituye un paso ciertamente positivo en la medida en que tiende a consolidar una cultura sanitaria de índole preventiva, tan necesaria en el país.
Tal como se informó en este diario, se trata de un proyecto de extensión universitaria que, bajo el nombre de "la plaza de la salud" fue gestado en la facultad de Medicina por las cátedras de Salud y Medicina Comunitaria y Salud Ambiental. A esa iniciativa se sumaron unidades académicas como las de Humanidades, Bellas Artes, Odontología, Agronomía y Veterinaria, cada una de las cuales -a través de grupos de docentes y alumnos- aportará actividades propias de sus disciplinas, relacionadas básicamente a la salud y al medio ambiente.
La importancia de las actividades físicas, los controles de presión arterial, la salud bucal, la salubridad requerible en un ambiente, la importancia de los productos orgánicos, formarán parte de las propuestas que se expondrán ante el público. Además, debido al constante crecimiento del proyecto, quienes se acerquen al lugar podrán comprar frutas y hortalizas recién cosechadas a productores locales, y hasta recibir consejos sobre salud animal.
En esta columna ya se han puesto de relieve operativos similares, impulsados no sólo por la Universidad sino por entidades profesionales, en los cuales pudieron detectarse referencias de mucho interés sobre el nivel de salud de la población. Y se destacó, asimismo, la evidente aceptación de muchas personas que se mostraron dispuestas a los sondeos que se realizaron.
Este fue el caso, por dar tan sólo un ejemplo, del estudio orientativo realizado por la Sociedad de Tisiología y Neumología de la Provincia a personas que aceptaron someterse a espirometrías gratis en la Plaza San Martín hace algunos meses.
Resultaría entonces, por cierto, muy valioso que las autoridades sanitarias establecieran también sistemas que fomenten la prevención y, por cierto, la realización de controles periódicos de salud para la población de toda edad, que debieran ser obligatorios. Como se sabe, cada vez cobra mayor valor la realización de chequeos médicos preventivos, especialmente como método de detección temprana de muchas enfermedades.
Esta propuesta que corporizan ahora seis unidades académicas contribuye a que la población cuente con mayores conocimientos y disponga de referencias sobre la mejor forma de cuidar su salud y respetar el medio ambiente en el que vive.
Sería gravitante, entonces, que persistan y se intensifiquen proyectos como el aquí mencionado que, en definitiva, apuntan a una mayor concientización de la población. Pero la iniciativa también importa, en la medida en que deja establecido un nuevo testimonio sobre el acercamiento que debe y puede existir entre la Universidad y la sociedad a la que ella pertenece.