Una condena posible por la valentía de los testigos
Esta historia que tiene un final, tiene también un agradecimiento. De no ser por la valentía de los testigos, el caso hubiese quedado como un suicidio.
Ya está. La historia tiene un final. Le dieron perpetua a Norberto Fabián Núñez, el hombre que mató al novio de su hija en Pergamino, tirándolo desde un séptimo piso.
Pero esta historia que tiene un final, tiene también un agradecimiento. De no ser por la valentía de los testigos, el caso hubiese quedado como un suicidio.Luego, los peritajes confirmaron los dichos de las testigos: la muerte de Iván había sido un asesinato, no un suicidio.