Un llamado anónimo denunció que Melina fue víctima de una red de trata de personas
Antes de que el cuerpo de la joven de 17 años aparezca al costado del Río Reconquista alguien llamó a la familia de la víctima y dijo que había sido secuestrada.
El caso del homicidio de Melina Romero, la joven que estuvo desaparecida tras salir de un boliche de San Martín el 24 de agosto, se encauzó sobre la principal hipótesis sostenida por varios testigos: al menos cinco hombres que ella conocía la llevaron a la casa de uno de los chicos ("Toto") allí quisieron tener relaciones sexuales con ella, Melina se negó, la violaron y mataron.
Sin embargo habría otra línea de investigación que adjudica la desaparición de la joven a una red de trata de personas. El día 8 de septiembre, cuando Melina seguía desaparecida una voz masculina llamó a la casa de la víctima para decir que la chica había sido secuestrada por una red de trata de personas. Según el diario Crónica, quien atendió el teléfono fue el hermano de Melina a quien le dijeron que su hermana había sido capturada por" una persona que se dedicaría a vender jóvenes y que no era la primera chica a la que le hacía esto. El hombre aportó una dirección, dio detalles de una casa y manifestó que sería el último domicilio del supuesto reclutador, quien se manejaba en varios vehículos, de los cuales dio marca y modelo".
Y antes de cortar expresó que el supuesto tratante está por la zona de la Villa 18 y añadió: "Ojalá encuentren viva a tu hermana".
Esto puede ser una referencia verdadera como un dato informado adrede para desviar la investigación en la que están detenidos por "homicidio doblemente calificado": "Toto" (16), Joel Fernández (20), alias Chavito; Elías Fernández (18) y Javier Rodríguez (44).