Un juez mendocino aprobó el alquiler de vientre y ordenó que se le pague a la mujer
Una pareja había contratado a una mujer mendocina para que geste al hijo biológico de ambos, pero la chica había sido denunciada.
Un matrimonio obtuvo la filiación de un bebé nacido en enero en Mendoza que fue fruto de un acuerdo de maternidad subrogada, más conocida como alquiler de vientre.
La pareja alquiló el vientre de una joven mendocina, a quien el juez Carlos Neirotti, del Primer Juzgado de Familia de Mendoza, ordenó que debía pagársele por el "servicio" prestado. "Es incongruente que el centro de salud interviniente perciba su ganancia, los comitentes reciban al niño, los abogados reciban sus honorarios, pero la mujer portadora no perciba ninguna contraprestación", argumentó el juez en favor de su fallo.
Cabe destacar que el costo total del procedimiento fue de alrededor de 400 mil pesos, de los cuales sólo 2 mil por mes correspondieron a la chica, por gastos que pudiera producirle el embarazo en curso. El resto fueron para gastos médicos y para gastos de abogados.
La pareja tomó esta decisión un año antes de llevarla a cabo, tiempo en el que se asesoraron en profundidad. En ese momento se pusieron en contacto con la agencia Argentina Maternity, a través de la que contactaron a la joven mendocina.
Finalmente, el niño nació el 9 de enero de 2015 sin mayores complicaciones, aunque una enfermera del hospital enterada de la situación decidió realizar la denuncia. La Justicia imputó a la joven por "dudosa identidad del menor", delito que podría terminar con la chica en la prisión.
Ante la situación, el juez Neirotti ordenó una prueba de ADN a los padres biológicos que resultó positivo, por lo que falló en favor de la pareja y aceptó el proceso de alquiler, tras lo cual el bebé podrá tener su identidad luego de casi siete meses.