Un índice oficial cercano a la realidad
*Por Alcadio Oña. Suele decirse que la inflación es la que cada cual percibe en su bolsillo, y la regla se cumple a pleno con la estadística del INDEC .
¿Alguien puede creer que el costo de vida subió 9,5 % el año pasado? ¿O que los alimentos se encarecieron apenas un 7,5 %? Quizás porque el largo brazo de Guillermo Moreno lo alcanzó parcialmente, hay otro índice, también oficial, en ciertos puntos parecido a la realidad : el de la construcción.
Canta, por ejemplo, que levantar una torre de 14 pisos sale 21 % más caro que hace un año, un aumento que obviamente fue trasladado al precio de los departamentos. Y que el costo de concretar el sueño de la casa propia trepó 20 %.
Hay más, en el mismo indicador, que puede acercarse a la percepción de la gente. El precio de la grifería subió 23,7 %; un 22,4 %, el de los sanitarios y 22 % la arena. Y si uno no tuvo más remedio que alquilar un camión volcador o una camioneta, la pasó mal: según números del propio Gobierno, esos servicios escalaron 59 y 53 %, respectivamente.
La vivienda, se sabe, es cualquier cosa menos un bien suntuario. Y muchísimos lo saben de sobra, pues el déficit habitacional suma 3 millones de unidades: a un promedio de tres por departamento, significa que 9 millones de personas padecen el problema .
Datos del INDEC explican por qué nada cambió: desde 2001, el costo de la construcción creció un impresionante 447 % .
Pero está claro que la cuestión no es con ese índice, además poco difundido. Sino con el de los precios al consumidor, que hace tiempo ni siquiera sirve de piso para las negociaciones salariales . ¿Cómo podría serlo, si existe un contraste tan grande entre el 9,5 % y el 23 % que miden institutos de gobiernos provinciales y estudios privados? Encima, el intento oficial por ponerle una cota del 18 % a las paritarias chocará con otro escollo. Hacia marzo, cuando la discusión avance hacia el punto más alto, empezará a conocerse el impacto de la quita de subsidios . O de hecho antes, en el momento en que arranque la pulseada docente.