Un hombre de 78 años apareció muerto en su casa: una marca en el cuello, el polvo de un matafuegos y una llamada a las 3 AM

El misterio ronda la muerte de Saúl Hilu, de 78 años, que fue hallado muerto en su domicilio en el barrio porteño de Palermo. Una marca en el cuello, el polvo de un matafuegos y una llamada telefónica a las 3 de la mañana son algunas de las principales pistas que están siguiendo los investigadores del crimen, y por el cual la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA) ya exigió su inmediato esclarecimiento.

El hombre de 78 años fue encontrado muerto este viernes al mediodía en el baño de su departamento de Palermo en el que vivía solo, y con ataduras en los tobillos. La hipótesis más fuerte apunta a un robo, ya que la vivienda estaba revuelta aunque la puerta de ingreso no tenía signos de violencia.

Según los investigadores Hilu murió el jueves a la madrugada por asfixia mecánica, y si bien la autopsia aún no concluyó ya se pudo detectar que el cuerpo tiene una marca en el cuello. Un cuadro compatible con un estrangulamiento.

Además, cuando los policías ingresaron a la escena del crimen se toparon con un polvillo blanco tirado en el piso, que dicen que podría ser compatible con el polvo de un matafuegos hallado en el lugar. Aunque habrá que esperar a las pericias en el laboratorio para determinar con certeza de qué sustancia se trata.

En caso de que finalmente sea polvo de matafuegos, tal vez este artefacto antiincendios haya sido utilizado por la víctima para defenderse de un ataque inesperado. O en su defecto por los atacantes para intentar vencer la resistencia de su blanco.

Otra teoría de los investigadores de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires es que ese presunto polvo de matafuegos pudo haber sido utilizado para tapar huellas del homicidio.

La víctima era dueña de una casa de venta de muebles de decoración que está ubicada en la calle Salguero al 2700, prácticamente a la vuelta de su inmueble en el que apareció muerto.

Si bien no había signos de violencia en la puerta del departamento, lo cual hace pensar que el victimario pudo ser un conocido de Hilu, no se descarta la posibilidad de que el hombre le haya franqueado el acceso a su vivienda tras ser engañado.

Dentro del inmueble estaba todo revuelto con cajones abiertos, como si alguien hubiese estado buscando “al voleo” dinero y/u objetos de valor dentro del lugar o algo en particular. Esto último podría ser una caja fuerte.

A su vez, una vecina le contó a los investigadores que ella escuchó ruidos muy fuertes provenientes de la casa de Hilu a las 3 de la mañana del jueves. Sin embargo, dijo que solo llamó a la administración del edificio, pero no a la Policía porque creyó que esos ruidos eran provocados por el hombre que luego se descubrió que fue asesinado.

A pesar de que por ahora no hay detenidos por el asesinato, ya se están peritando los videos de seguridad del edificio de la víctima y buscando otras cámaras en la zona para tratar de ubicar a los presuntos victimarios del hombre de 78 años, que era muy querido dentro de la colectividad judía.