Un gran susto para Natalie Portman
La actriz se comprometió tanto con su papel de bailarina en la aclamada película Black Swan, que perdió diez kilos y llegó a pensar que se iba a morir.
Natalie Portman está atravesando uno de los mejores momentos de su vida. Esta semana anunció que está esperando su primer hijo y que se casará con su novio, el coreógrafo y bailarín francés Benjamin Millepied.
Además, ya ha recibido varios premios por la película Black Swan (El cisne negro), y se descuenta que será nominada a un Oscar.
Sin embargo, tanta felicidad no llegó sin tener que pagar un alto precio. Para prepararse para el rol de bailarina que interpreta en el film de Darren Aronofsky, la menuda actriz entrenó durante año las exigentes rutinas de danza clásica, a punto tal que adelgazó diez kilos y sufrió varias lesiones.
"Había noches en las que pensaba que literalmente iba a morir. Fue la primera ocasión en que entendí cómo puedes ser absorbida por un papel que puede echarte para abajo", relató en una entrevista con la revista Entertainment Weekly.
Tanto esfuerzo tuvo su recompensa.