Un fenómeno llamado Andrea Politti
La conductora de "Los unos y los otros" en América es una excepción dentro de una programación que va por otro lado, y hace muy buen rating sin necesidad de ir tan lejos.
Por Adrián Pallares
@adrianpalla
Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich
Muchos programas de la tele que miden entre 5 y 6 puntos de ratings se llaman contentos y está muy bien con los números actuales. Los picos del prime time arañan 18, 19... a veces 20. En general se habla bastante de esos programas, sobre todo el rebote de los que están a la tarde donde suceden los asuntos mediáticos, faranduleros y chimenteros del momento.
Como una isla en medio del tsunami, sin que la tape la ola, ahí está Andrea Politti en América, con un programa llamado "Los unos y los otros". Una especie de paréntesis en el resto de la programación de un canal que arma su grilla con los temas en vivo por cadena nacional.
Sin embargo, allí se mantiene, a la hora de la siesta, un programa que habla de vínculos, de amores, de historias del corazón; por supuesto con una impronta televisiva donde están medidos los abrazos, la musiquita de fondo, los planos y toda la parafernalia que conlleva el género emotivo con la consabida búsqueda de impacto que el ciclo necesita.
Politti es ya una conductora altamente probada y dúctil que va de mover las caderas en "Doce corazones", a marcar la senda de "Cuestión de peso" -que heredó Claribel Medina- y ahora emocionarse con las historias de "Los unos y los otros". Aunque la extrañamos como actriz en la tele -la tía Inés de "Resistiré" aún está en nuestros corazones- es una de las conductoras ineludibles de la tele de hoy.
Su programa no rebota en los ciclos de archivo, no lo levantan las páginas ni se twitea mucho sobre lo que allí sucede, pero hace el mismo rating de otros que hacen más ruido pero menos nueces. Bien por ella.
@adrianpalla
Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich
Muchos programas de la tele que miden entre 5 y 6 puntos de ratings se llaman contentos y está muy bien con los números actuales. Los picos del prime time arañan 18, 19... a veces 20. En general se habla bastante de esos programas, sobre todo el rebote de los que están a la tarde donde suceden los asuntos mediáticos, faranduleros y chimenteros del momento.
Como una isla en medio del tsunami, sin que la tape la ola, ahí está Andrea Politti en América, con un programa llamado "Los unos y los otros". Una especie de paréntesis en el resto de la programación de un canal que arma su grilla con los temas en vivo por cadena nacional.
Sin embargo, allí se mantiene, a la hora de la siesta, un programa que habla de vínculos, de amores, de historias del corazón; por supuesto con una impronta televisiva donde están medidos los abrazos, la musiquita de fondo, los planos y toda la parafernalia que conlleva el género emotivo con la consabida búsqueda de impacto que el ciclo necesita.
Politti es ya una conductora altamente probada y dúctil que va de mover las caderas en "Doce corazones", a marcar la senda de "Cuestión de peso" -que heredó Claribel Medina- y ahora emocionarse con las historias de "Los unos y los otros". Aunque la extrañamos como actriz en la tele -la tía Inés de "Resistiré" aún está en nuestros corazones- es una de las conductoras ineludibles de la tele de hoy.
Su programa no rebota en los ciclos de archivo, no lo levantan las páginas ni se twitea mucho sobre lo que allí sucede, pero hace el mismo rating de otros que hacen más ruido pero menos nueces. Bien por ella.