Un delincuente secuestró a una familia por tres horas

El delincuente que tomó como rehenes a integrantes de una familia en una vivienda de la
localidad bonaerense de Villa Centenario se entregó esta mañana, pasadas las 11:30, a la Policía.
  

Luego de más de tres horas de tensión, el incidente, ocurrido en una vivienda de la calle Machado al 200 terminó con los rehenes -que serían un hombre, su esposa y el hijo de ambos, de nueve años- ilesos.
  

Una información conocida en forma extraoficial indicaba que el delincuente detenido resultó herido en una mano durante el tiroteo previo con la Policía, luego de haber entrado a robar a otra vivienda de la misma zona.

Un delincuente se atrincheró esta mañana en una casa y mantenía como rehenes a una mujer y al menos a uno de sus hijos, de nueve años, luego de cometer un asalto junto a un cómplice que fue detenido, en la localidad bonaerense de Villa Centenario.

Luego de una negociación de tres horas el delincuente liberó al nene de 9 años, cuando ingresó a la vivienda su esposa que está embarazada. El secuestrador tiene una herida de bala en una de sus manos y sería su esposa la que lo trata de convencer que se entregue para poder ser atendido.

El incidente ocurría esta mañana en una casa situada en la calle Machado 250, en esa localidad del partido de Lomas de Zamora, en la zona sur del Gran Buenos Aires.

Todo se inició pasadas las 8:00, cuando dos delincuentes asaltaron una vivienda e intervino la Policía.

Enseguida, se inició una persecución que terminó cuando uno de los asaltantes fue detenido y el otro se atrincheró en una vivienda, donde habría tomado al menos a dos integrantes de una familia como rehenes.

El lugar fue rodeado por varias decenas de policías, entre ellos efectivos del grupo especial Halcón, que comenzaron a negociar con el asaltante.

El incidente es la segunda toma de rehenes en menos 36 horas que se produce el conurbano, después de la que se registró entre las últimas horas del lunes y la madrugada del martes último, en un supermercado de propietarios chinos situado en Lomas del Mirador.

Todo se inició a pocos metros del lugar cuando una vecina llamada Griselda notó que habían entrado a robar a una vivienda, por lo que llamó al teléfono 911.

"La Policía llegó en apenas diez minutos, tiraron abajo las puertas, entraron y detuvieron a un hombre gordito, de unos 30 años. Otro de alrededor de 23, flaquito, escapó", explicó la mujer.

Según indicó, se produjo una breve persecución en la que se realizaron algunos disparos, hasta que el delincuente se introdujo en una casa..