Trasladan los cuerpos de los rugbiers muertos
Los cuerpos de los cinco rugbiers que murieron incinerados en un accidente de tránsito en la localidad misionera de Puerto Piray eran trasladados esta mañana a la localidad bonaerense de San Miguel, pero la identificación de las víctimas podría demorar el velatorio.
Así lo informó esta mañana a Télam el secretario del San Miguel Rugby & Hockey Club, Luis Figún, quien explicó que "la Justicia misionera ya liberó los cuerpos que ya están en viaje, a 500 kilómetros de Buenos Aires".
"El problema es que como están muy carbonizados aún no se pudo identificar fehacientemente a cada víctima y, por ese motivo, se necesita una autorización judicial para que se entreguen los cuerpos y poder realizar el velatorio, que podría demorarse por ese motivo", señaló Figún.
El secretario del club también comentó que "lo más probable es que el velatorio se realice en el Palacio Municipal de San Miguel, ya que el club no es tan grande para albergar a tanta gente".
Varios compañeros y conocidos de las víctimas se acercaban esta mañana a la sede del club en Irigoin al 3300 de San Miguel a la espera de la llegada de los cuerpos.
"Esto es un antes y un después. Es una experiencia nada fácil. Cinco personas, cinco amigos. No puedo creerlo", dijo hoy a la prensa José Díaz, un compañero del plantel.
"Es un club bastante unido. Siempre adentro de la cancha y los entrenamientos, donde más se nota el sacrificio y el compañerismo, creo que eso es lo que nos unía a todos", agregó.
Díaz afirmó que los mellizos Juan Pablo y Juan Manuel Ligorria "eran la alegría del grupo, dos chicos simples, espontáneos, divertidos y con la alegría de los 22 años".
"Siempre estuvieron en el club. Es una camada de chicos difícil de encontrar, jugaban desde los 12 o 13 años, ya formaban parte del plantel superior", comentó.
"Todos siempre colaboraban en lo que se podía, ayudando a enseñarle a los más chicos. El capitán (Máximo Taborda) ayudando siempre, colaborando con lo que no tenía, era un pibe muy solidario", concluyó.
El accidente ocurrió a las 3 de la madrugada del sábado cuando el auto en el que viajaban despistó y se incendió sobre la ruta nacional 12, en cercanías del acceso a la localidad de Puerto Piray.
Los cinco rugbiers formaban parte del plantel de primera división que estaba de gira e iba a jugar un torneo por Misiones.
El automóvil Chevrolet Astra -propiedad y conducido por el capitán Taborda-, se despistó, chocó contra un paredón, se incendió y los cinco ocupantes murieron calcinados.
Además de Taborda (37) y los mellizos Ligorria (22), las otras dos víctimas fueron Mariano Falcón (25) y Gastón Arias Neschenfeller (27).
Si bien la Justicia misionera se encuentra en plena etapa investigativa del accidente, las primeras estimaciones indican que el vehículo circulaba a una altísima velocidad, que podría superar los 150 kilómetros por hora.