Tras el asesinato de Norma Bustos, otras madres alertan: "No hay límites y vendrán por el resto"

Tras el asesinato de Norma Bustos en manos de sicarios, la titular de la ONG Madres Solidarias mostró su preocupación y desaliento por la situación reinante en La Tablada, un barrio azotado por el crimen narco. Bustos había denunciado a bandas narco por el asesinato de su propio hijo.

A media cuadra del lugar donde una banda de narcotraficantes acribilló a su hijo hace un año, Norma Bustos corrió la misma suerte por animarse a señalar a los responsables. La desidia reinante en el territorio se refleja en las palabras de Norma Castaño, quien presiden la Madres Solidarias.

"La verdad es que es muy lamentable, ya se ha pasado el límite. Así como vemos morir a nuestros hijos, ahora le tocó a una madre", expresó la mujer, invadida por la amargura de una lucha desigual, en donde la muerte se ha convertido en tema de todos los días. Una circunstancia derivada del mercado de las drogas que carcome a la población.

"Tenemos custodia las 24 horas del día en mi casa, cada vez que suena el teléfono tememos por la vida de nuestros hijos", contó Castaño, quien se vio obligad a luchar por la vida de su hijo. La mujer fue capaz de denunciar a narcotraficantes que le vendían sustancias prohibidas a al adolescente y hoy vive alarmada, a la espera de los peor.

Acerca del caso de Bustos, Castaño expresó: "Esto tiene que ser el final o el comienzo de algo, y que las autoridades tomen conciencia de lo que pasa. No puede ser que una madre que denuncia la venta de droga para salvar a la juventud, a nuestros hijos, muera como murió Norma Bustos".

"Estamos shockeados por lo que pasó y nos preguntamos qué nos puede suceder a nosotras. Se animaron a matar a una madre, después seguirán con otras. Esto es como una película, pero ocurre tanto en Rosario como en Santa Fe", recalcó en una nota difundida por el diario La Nación. "Lamentablemente, los chicos que se inician en la droga tienen dos caminos. O la cárcel o la muerte", sentenció.