Tragedia en una pileta
Un chico de 16 años falleció ayer ahogado cuando fue succionado por la bomba de una pileta olímpica que funciona en un complejo deportivo de La Plata, informaron voceros policiales.
El joven, cuyos datos de identidad se mantienen en reserva por cuestiones legales, quedó atrapado con una de sus manos en la rejilla del fondo de la pileta y, pese a que fue inmediatamente asistido por los profesores de natación, no pudieron salvarle la vida.
El deceso del chico se produjo a las 18 en el Complejo Puelo, en la Avenida 25 entre 62 y 63, cuando el natatorio era utilizado por gran cantidad de personas.
Su muerte originó conmoción y escenas de dolor entre los que concurren a esa pileta, ya que la víctima practicaba allí natación desde hace tiempo.
Apenas conocido el hecho, se hicieron presentes en el complejo efectivos de la Policía Científica que cumplieron con una serie de protocolos para certificar la causa de muerte del muchacho.
Un grupo de personas que concurre a ese lugar coincidió en quejarse por la actitud de los responsables del predio al advertir que "es una práctica responsable no tener en funcionamiento los sistemas mecánicos de bombeo de una pileta cuando está siendo utilizada por la gente".
En el caso interviene la justicia de menores pero paralelamente también lo hace la Fiscalía en turno para determinar las responsabilidades del hecho fatal.