Tragedia de LAPA: indemnizan a familiares porque les entregaron cadáveres equivocados
Tres familias del accidente denunciaron haber velado y enterrado el cuerpo de un desconocido.
Tres familias de víctimas de la tragedia de LAPA, que el 31 de agosto de 1999 provocó 65 personas muertas y 17 heridas, serán indemnizadas con 100 mil pesos más intereses porque les entregaron cadáveres equivocados.
La Sala Primera de la Cámara en lo Contencioso Administrativo comprobó que los familiares de los muertos debieron "exhumar los cuerpos oportunamente entregados" y "finalmente, luego de la rectificación pertinente, y la entrega definitiva del cuerpo correspondiente familiar, el 23 de diciembre de 1999, procedieron al respectivo nuevo sepelio e inhumación definitiva".
"El menoscabo sufrido se encuentra configurado por haber tenido que sepultar dos veces a un familiar, un hecho traumático fuertemente desequilibrante que hizo resurgir el duelo padecido con toda su integridad original", sostuvieron los jueces Carlos Grecco y Clara Do Pico.
"El daño se traduce por la prolongación del duelo, por saber que se lloró, se recibieron condolencias, se publicaron avisos fúnebres, se veló y se enterró el cadáver de un desconocido", añade el fallo.
El avión de LAPA matrícula LV-WRZ se accidentó cuando no puso despegar hacia Córdoba el 31 de agosto de 1999, en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery, y causó la muerte de 65 personas y heridas a otras 17.
Según se desprende de la causa, la mayoría de los cadáveres fueron identificados, pero restaban 12 para los cuales "se recurrió a la metodología basada en la tipificación de ADN".
Así, se descubrió que "los cadáveres reclamados por esos grupos familiares, habían sido entregados con otra identidad", lo que derivó en que "los deudos de las víctimas del accidente en masa sepultaron los cuerpos de quienes no eran sus parientes respectivos".
En total, consigna el fallo, debieron "efectuarse nueve cambios de cadáveres".
"El servicio público ha funcionado defectuosamente, sin culpa de los agentes pero ocasionando un daño injusto, en tanto es indudable que los perjudicados no tenían por qué tolerarlo", dijo la Cámara.
El tribunal consideró también que las primeras inhumaciones se realizaron entre el 2 y el 5 de setiembre de 1999, pero tras detectar los errores de identificación fueron exhumados el 13 de diciembre y las nuevas exequias, ya con los cuerpos correctos, se llevó a cabo el 23 de diciembre, un día antes de la Nochebuena.