Trabajo temporal, recurso anti crisis
* Por Roberto Giunchetti. La dinámica de la economía mundial, junto con el proceso de crisis que están sufriendo varios mercados, llevó nuevamente a los Estados a valorar...
Esta fue una de las principales conclusiones a la que se llegó durante la Asamblea Anual de la Confederación Latinoamericana de Empresas de Trabajo Temporario y actividades afines (CLETT&A), realizada en Buenos Aires y pasado mes y de la que participó FAETT y donde se destacó que la tasa de actividad de los servicios privados de empleo se reactiva varios meses antes en las fases de recuperación general de la economía, lo cual la convierte en un excelente termómetro para la gestión gubernamental.
En este sentido, las tasas de desempleo y de penetración de las agencias de empleo eventual siguen pautas inversas, ya que, cuanta más alta es la tasa de penetración de estas agencias, más baja es la tasa de desempleo, tendencia que desde las empresas agrupadas en FAETT experimentamos periódicamente. Sin embargo, los resultados están atados en buena medida al marco regulatorio que rige sobre la actividad de estas empresas. Países como Alemania, Bélgica, Estados Unidos y la Argentina son mercados sumamente regulados, en donde el trabajo temporario funciona como un puente hacia la inserción laboral de las personas que buscan su primer empleo o de aquellas que buscan un mayor balance entre su vida personal y el trabajo. Tengamos en cuenta que solamente en la Argentina durante 2011 más de dos millones de personas se presentaron a empresas de trabajo temporario para aplicar a distintas oportunidades laborales.
Sin embargo, la situación regulatoria es diferente en cada mercado y esto se ve claramente en los niveles de precarización del empleo. De hecho, existe una correlación inversa entre el nivel de actividad económica ilegal y el nivel de penetración de las agencias de empleo. Por caso, Italia legalizó el trabajo por agencia en el año 1998 como una medida contra el trabajo no declarado.
Adaptándose a los cambios
El sector de las empresas de trabajo temporario históricamente ha colaborado estrechamente con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y con los sindicatos internacionales (CSI, UNI Global) para promover la adopción de normativas adecuadas sobre el trabajo de agencia en países donde aun no tienen un marco regulatorio, proponiendo como pautas las disposiciones de la Convención N´ 181 de la OIT sobre las agencias privadas de empleo.
En este sentido, el sector tiene características que le permiten apoyar a los gobiernos, a las empresas y a los trabajadores a la hora de enfrentarse a la dinámica cada vez más acelerada de los mercados laborales y de gestionar el cambio, ya sea estacional, cíclico o estructural.
América Latina tiene el gran desafío de avanzar en la materia, donde la Argentina, México y Chile se distinguen del resto, en vista de sus avances en materia regulatoria. De todos modos, aun hay mucho por hacer, desde las empresas del sector, informando los beneficios y el trabajo que se desarrolla día a día; desde lo normativo, sumando nuevas medidas que contribuyan a la generación de empleo registrado y transparente. Como siempre, el desafío es de todos.
En este sentido, las tasas de desempleo y de penetración de las agencias de empleo eventual siguen pautas inversas, ya que, cuanta más alta es la tasa de penetración de estas agencias, más baja es la tasa de desempleo, tendencia que desde las empresas agrupadas en FAETT experimentamos periódicamente. Sin embargo, los resultados están atados en buena medida al marco regulatorio que rige sobre la actividad de estas empresas. Países como Alemania, Bélgica, Estados Unidos y la Argentina son mercados sumamente regulados, en donde el trabajo temporario funciona como un puente hacia la inserción laboral de las personas que buscan su primer empleo o de aquellas que buscan un mayor balance entre su vida personal y el trabajo. Tengamos en cuenta que solamente en la Argentina durante 2011 más de dos millones de personas se presentaron a empresas de trabajo temporario para aplicar a distintas oportunidades laborales.
Sin embargo, la situación regulatoria es diferente en cada mercado y esto se ve claramente en los niveles de precarización del empleo. De hecho, existe una correlación inversa entre el nivel de actividad económica ilegal y el nivel de penetración de las agencias de empleo. Por caso, Italia legalizó el trabajo por agencia en el año 1998 como una medida contra el trabajo no declarado.
Adaptándose a los cambios
El sector de las empresas de trabajo temporario históricamente ha colaborado estrechamente con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y con los sindicatos internacionales (CSI, UNI Global) para promover la adopción de normativas adecuadas sobre el trabajo de agencia en países donde aun no tienen un marco regulatorio, proponiendo como pautas las disposiciones de la Convención N´ 181 de la OIT sobre las agencias privadas de empleo.
En este sentido, el sector tiene características que le permiten apoyar a los gobiernos, a las empresas y a los trabajadores a la hora de enfrentarse a la dinámica cada vez más acelerada de los mercados laborales y de gestionar el cambio, ya sea estacional, cíclico o estructural.
América Latina tiene el gran desafío de avanzar en la materia, donde la Argentina, México y Chile se distinguen del resto, en vista de sus avances en materia regulatoria. De todos modos, aun hay mucho por hacer, desde las empresas del sector, informando los beneficios y el trabajo que se desarrolla día a día; desde lo normativo, sumando nuevas medidas que contribuyan a la generación de empleo registrado y transparente. Como siempre, el desafío es de todos.