Tornados en Estados Unidos: 37 muertos y cientos de heridos
La ola de tornados que azota Estados Unidos desde hace una semana dejó por ahora 37 muertos, cientos de heridos e importantes daños materiales en estados del centro y el sureste del país.
En la región central, el estado de Kentucky registra 18 víctimas mortales, seguido de Indiana con 14, Ohio con tres y Alabama y Georgia con una persona fallecida, según los reportes de
las respectivas autoridades regionales.
Los servicios meteorológicos nacionales lanzaron el sábado una alerta de tornados que podría afectar a zonas de Alabama, Florida y Georgia, en el sudeste del país, con vientos pronosticados de más de 120 kmh, lluvias cargadas con granizos de más de 4 cm de
diámetro y descargas eléctricas.
El sábado los servicios de rescate intentaban localizar a posibles sobrevivientes entre los escombros de las casas destrozadas el viernes por devastadores tornados que afectaron a
la región central de Estados Unidos, en especial a los estados de Kentucky y de Indiana, pero también a Ohio, Tennessee e Illinois.
El último informe provisional sobre el mediodía estimaba que 80 tornados devastaron a seis estados el viernes.
Las imágenes del fenómeno climático son surrealistas: camiones y árboles volaron por los aires el viernes con el paso de mortíferas nubes. Autobuses escolares se incrustaron contra casas de ladrillo, camiones fueron arrojados a lagos, y muchas viviendas fueron reducidas a escombros.
En Indiana, donde 14 personas murieron según el gobernador, Mitch Daniels, algunas pequeñas localidades casi fueron borradas del mapa.
"Los reportes telefónicos indicaban que (el pueblo de) Marysville ha desaparecido", dijo el mayor Chuck Adams, portavoz del departamento del alguacil.
En Henryville, que cuenta con cerca de 2.000 habitantes, las imágenes de la televisión estadounidense mostraban buses escolares volcados y casas reducidas a escombros.
El liceo de Henryville sufrió "bastantes daños", pero por suerte todos los alumnos fueron evacuados, y solo algunos sufrieron heridas leves -algunos cortes y magullones- dijo Adams a
la AFP.
Según el Indianapolis Star, 250 miembros de la Guardia Nacional fueron movilizados hacia las zonas afectadas en helicópteros.
"Estamos acostumbrados a la cólera de la Madre Naturaleza en Indiana, pero lo que acabo de ver es terrible", dijo Daniels ante la prensa.
En Kentucky se registraron 13 tornados que acabaron con la vida de 18 personas, según datos de los servicios de emergencia confirmados por el propio gobernador, Steve Beshear. Se indicó que hubo daños en 40 condados y unas 22.000 personas quedaron sin energía eléctrica.
"Han sido unas 24 horas muy difíciles en Kentucky", declaró a la AFP el director de comunicaciones del gobernador, Kerri Richardson.
Beshear indicó que al menos 300 personas resultaron heridas en el estado.
Otras tres personas fallecieron en Ohio, una en Alabama y otra en Georgia.
El Servicio Meteorológico Nacional (en inglés NWS) recibió 83 reportes de tornados sólo el viernes, con lo cual el total semanal llegó a 133.
Para el sábado, las autoridades meteorológicas pidieron a la población que permaneciera "alerta" en el sudeste de Alabama -donde murió una persona-, el centro y el este de Florida, y el
sur y sudeste de Georgia -donde murió también una persona.
En 2011 cerca de 545 personas murieron en Estados Unidos debido a los tornados, un récord desde 1936, según datos del Servicio Nacional de Meteorología.
Este año los tornados se desataron un poco más temprano, con el suave invierno creando las condiciones adecuadas para que los frentes fríos choquen contra el aire más caliente creando el fenómeno.
"Sabíamos que iba a ser malo", admitió Angie Lese, meteoróloga del NWS, para resaltar que "todos los ingredientes se juntaron para una importante irrupción".
las respectivas autoridades regionales.
Los servicios meteorológicos nacionales lanzaron el sábado una alerta de tornados que podría afectar a zonas de Alabama, Florida y Georgia, en el sudeste del país, con vientos pronosticados de más de 120 kmh, lluvias cargadas con granizos de más de 4 cm de
diámetro y descargas eléctricas.
El sábado los servicios de rescate intentaban localizar a posibles sobrevivientes entre los escombros de las casas destrozadas el viernes por devastadores tornados que afectaron a
la región central de Estados Unidos, en especial a los estados de Kentucky y de Indiana, pero también a Ohio, Tennessee e Illinois.
El último informe provisional sobre el mediodía estimaba que 80 tornados devastaron a seis estados el viernes.
Las imágenes del fenómeno climático son surrealistas: camiones y árboles volaron por los aires el viernes con el paso de mortíferas nubes. Autobuses escolares se incrustaron contra casas de ladrillo, camiones fueron arrojados a lagos, y muchas viviendas fueron reducidas a escombros.
En Indiana, donde 14 personas murieron según el gobernador, Mitch Daniels, algunas pequeñas localidades casi fueron borradas del mapa.
"Los reportes telefónicos indicaban que (el pueblo de) Marysville ha desaparecido", dijo el mayor Chuck Adams, portavoz del departamento del alguacil.
En Henryville, que cuenta con cerca de 2.000 habitantes, las imágenes de la televisión estadounidense mostraban buses escolares volcados y casas reducidas a escombros.
El liceo de Henryville sufrió "bastantes daños", pero por suerte todos los alumnos fueron evacuados, y solo algunos sufrieron heridas leves -algunos cortes y magullones- dijo Adams a
la AFP.
Según el Indianapolis Star, 250 miembros de la Guardia Nacional fueron movilizados hacia las zonas afectadas en helicópteros.
"Estamos acostumbrados a la cólera de la Madre Naturaleza en Indiana, pero lo que acabo de ver es terrible", dijo Daniels ante la prensa.
En Kentucky se registraron 13 tornados que acabaron con la vida de 18 personas, según datos de los servicios de emergencia confirmados por el propio gobernador, Steve Beshear. Se indicó que hubo daños en 40 condados y unas 22.000 personas quedaron sin energía eléctrica.
"Han sido unas 24 horas muy difíciles en Kentucky", declaró a la AFP el director de comunicaciones del gobernador, Kerri Richardson.
Beshear indicó que al menos 300 personas resultaron heridas en el estado.
Otras tres personas fallecieron en Ohio, una en Alabama y otra en Georgia.
El Servicio Meteorológico Nacional (en inglés NWS) recibió 83 reportes de tornados sólo el viernes, con lo cual el total semanal llegó a 133.
Para el sábado, las autoridades meteorológicas pidieron a la población que permaneciera "alerta" en el sudeste de Alabama -donde murió una persona-, el centro y el este de Florida, y el
sur y sudeste de Georgia -donde murió también una persona.
En 2011 cerca de 545 personas murieron en Estados Unidos debido a los tornados, un récord desde 1936, según datos del Servicio Nacional de Meteorología.
Este año los tornados se desataron un poco más temprano, con el suave invierno creando las condiciones adecuadas para que los frentes fríos choquen contra el aire más caliente creando el fenómeno.
"Sabíamos que iba a ser malo", admitió Angie Lese, meteoróloga del NWS, para resaltar que "todos los ingredientes se juntaron para una importante irrupción".