Tiroteo en Nueva York: difunden fotos del principal sospechoso y aseguran que disparó 33 veces
Diez personas fueron baleadas y otras 6 fueron hospitalizadas. La pista de una camioneta alquilada, clave en la investigación.
Chaleco, máscara y un buzo gris. Esas son algunas de las señas para identificar al tirador de Nueva York, que abrió fuego en el subte de esa ciudad de los Estados Unidos e hirió a 10 personas. Otras 6 fueron hospitalizadas por otras afecciones. Los investigadores encontraron un arma y varios cargadores en la estación.
Cerca de las 20, la Policía difundió imágenes de un sospechoso. Fue identificado como Frank James. "Es una persona de interés en el tiroteo que tuvo lugar en el tren N en Brooklyn el martes por la mañana", informaron en Twitter, donde pidieron colaboración de las personas que lo hayan visto.
El ataque ocurrió en la estación 36th del barrio Sunset Park de Brooklyn. Eran cerca de las 8.30 y decenas de personas se preparaban para viajar a sus trabajos. Pero un hombre lanzó una granada de humo en un vagón y, en medio de la desorientación y el pánico, comenzó a disparar a los pasajeros.
Según informó el jefe de detectives de la policía de Nueva York, James Essig, el agresor disparó al menos 33 veces.
De los diez heridos por bala, la mitad están en estado crítico pero estable, señaló una fuente sanitaria, mientras que hay otros 19 atendidos en hospitales, varios de ellos por inhalación de humo.
La Policía de Nueva York dio algunas características del sospechoso, al que buscan en un amplio operativo por la ciudad.
Según la descripción, es un hombre de raza negra, mide aproximadamente 1,65 metros, es de contextura robusta y pesaría unos 77 kilos. Al momento del ataque, vestía un buzo gris con capucha, un chaleco verde como los que se usan en las obras en construcción y una máscara antigás. Así lo señaló la jefa policial Keechant Sewell.
Por su apariencia, al menos uno de los testigos lo confundió con un trabajador de la Autoridad Metropolitana de Transporte, indicó el New York Post.
Además, medios estadounidenses reproducen un mail interno de la Policía en el que vinculan una camioneta al incidente. En ese sentido, piden estar atentos a un vehículo U-Haul (de mudanza) de color blanco, con patente de Arizona.
Según informaron fuentes policiales a la CNN, el autor de los disparos habría sido identificado gracias a la tarjeta de crédito que utilizó para alquilar el vehículo.
“Estamos tratando de determinar si tiene alguna conexión con el tren”, dijo el jefe de detectives de la policía de Nueva York, James Essig. "Sabemos que el Sr. James alquiló ese camión U-Haul en Filadelfia", dijo.
El alcalde Eric Adams pidió en videoconferencia que el público aporte todas las pistas posibles y ayude a capturar al sospechoso, al que acusó de cometer un "acto para aterrorizar al sistema".
Sewell aseguró, horas más tarde del incidente, que el tiroteo no se está investigando como terrorismo. "Aunque ha sido un incidente violento, aparentemente nadie tiene heridas mortales como consecuencia de este caso", dijo la autoridad policial. Entre los afectados hay 10 heridos de bala. La mitad de ellos se encuentran en estado crítico pero estable.
El operativo afronta una dificultad extra. De acuerdo a fuentes de la investigación citadas por los medios neoyorquinos, las cámaras de la estación no estaban funcionando al momento del ataque. Analizan los motivos del desperfecto. Incluso un testigo habría dicho que los dispositivos "dejaban de funcionar de vez en cuando".
Mientras sigue la búsqueda del sospechoso, los investigadores encontraron en la estación un arma. Se habría atascado en el ataque. También hallaron varios cargadores y fuegos artificiales.
En las imágenes viralizadas en redes sociales se ve una escena desesperante, con una decena de personas heridas y tiradas en los andenes y en el suelo del vagón, mientras otros se acercaban a asistirlos.
Con esa situación se encontraron los Bomberos, que habían recibido un llamado urgente por un supuesto incendio en la estación. En alerta, las autoridades suspendieron rápidamente varias líneas del subte, para inspeccionar los trenes y las estaciones.
Además, se cortó el tránsito en la zona de la estación 36th y las escuelas de los alrededores fueron cerradas por precaución.
El sistema de transporte ya funciona con normalidad en la mayoría de las líneas, mientras que autobuses suplementan el recorrido entre las estaciones con servicio interrumpido.
En un primer momento, el episodio recordó al intento de ataque terrorista en una estación de Manhattan en 2017. Su autor se encuentra condenado a cadena perpetua.
También encendió el debate por la ola de tiroteos que atraviesa la ciudad en los últimos tiempos. Desde comienzos de 202, más de 360 personas resultaron víctimas de este tipo de ataques. Según datos oficiales, solo en los dos últimos años estos incidentes se incrementaron un 72% en los últimos dos años.
La gobernadora Kathy Hochul aseguró que los neoyorquinos están "cansados y hartos" de la violencia armada. Además, se comprometió a usar todas las herramientas disponibles para combatirla.
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