Testigo contó que mientras defecaba, vio a Gómez traspasando de auto a Natalia
Es el testigo clave de la causa. En la instrucción declaró con reserva de identidad. Durante la audiencia de hoy, identificó al acusado.
Otro testigo complicó hoy la situación de Nicolás Gómez en el juicio por el crimen de Natalia Di Gallo, asesinada hace 10 años en el partido bonaerense de Berazategui, al identificar al imputado como uno de los hombres que retenía a la víctima y la traspasaba de un auto a otro la noche del homicidio.
Se trata de Rubén César González, quien en la etapa de instrucción había declarado con reserva de identidad aunque hoy se presentó en audiencia pública ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Quilmes.
"Una vez vi una cosa y maldigo la hora en que estuve ahí", señaló respecto a lo que presenció la noche del 28 de diciembre de 2003, cuando Natalia (16) fue vista con vida por última vez luego de haber salido junto a Gómez (29) en su Renault 11 celeste.
González declaró que esa noche él estaba en una parada de colectivos en ruta provincial 36 y avenida Bosques, en la localidad homónima a dicha avenida, cuando se descompuso y se dirigió hasta un zanjón de la banquina a defecar.
Desde allí, el testigo dijo haber visto un Renault 11 celeste estacionarse a los pocos metros y cerca de este otro auto "nuevito y oscurito".
El testigo vio que del primer vehículo un muchacho descendió "del lado del volante", dio la vuelta y abrió la puerta "del otro lado".
González recordó que en ese momento escuchó "portazos" y voces masculinas que decían "¡dale!" y "apuráte, boludo", y luego una mujer que exclamaba "¡qué me estás haciendo!".
Consultado sobre quién era el muchacho del Renault 11, González respondió: "Es el mismo pibe que vi después en el Parque Pereyra haciendo la denuncia de que lo habían asaltado y roto el vidrio del auto. Lo vi en la tele y en los diarios".
Entonces, le preguntaron al testigo si podía identificar a esa persona en el recinto y González señaló a Gómez y dijo: "Ése es".
Al inicio de su testimonial de esta mañana, a González le preguntaron por qué había declarado en la causa por primera vez en 2011 y él respondió: "Tenía que sacarme un peso de encima que venía arrastrando y me tenía mal".
La semana pasada, otro testigo, Walter Claudio Bacigalupe, describió una secuencia similar a la que dijo haber presenciado González y en la que también identificó al acusado.
Natalia fue vista con vida por última vez aquella noche del 28 de diciembre de 2003, cuando salió de su casa en Bosques junto a Gómez, y el 1 de enero de 2004 la encontraron asesinada y envuelta en bolsas de nailon en el Parque Pereyra de Berazategui. La autopsia determinó que fue violada y murió asfixiada.
Gómez siempre se declaró inocente y denunció que él y Natalia estaban dentro de su auto estacionado en el mencionado parque cuando un delincuente armado los asaltó, lo encerró en el baúl y raptó a la adolescente.