Terror en Ezpeleta: roban a una mujer y la violan delante de sus hijas
Tres delincuentes ingresaron a una casa humilde del barrio Los Alamos pero al no encontrar objetos de valor para llevarse violaron a la dueña de la casa delante de sus dos pequeñas hijas.
Según pudo averiguarse, la víctima del brutal ataque es una joven madre de 22 años, que en ese momento -pasada la medianoche- se encontraba sin la compañía de su pareja, quien no había regresado del trabajo.
Fuentes policiales revelaron que "el marido de la mujer amplió la denuncia porque sufrieron amenazas".
Según explicaron los voceros, la joven ultrajada denunció el calvario vivido en la Comisaría 3ra. de Quilmes Oeste y, por este motivo, los criminales "les advirtieron para que no metan a la policía", motivo por el cual se sospecha que los culpables de este hecho viven en el mismo barrio que los damnificados.
De acuerdo a su testimonio de una vecina, tras el ataque la mujer permaneció en estado de shock por varias horas, hasta que logró reunir fuerzas y se dirigió hasta la seccional de su jurisdicción, donde los efectivos policiales "no querían tomarle la denuncia porque no lo creían".
"Pensaban que era mentira lo de los tipos encapuchados, la hicieron esperar como ocho horas hasta que no tuvieron más remedio y le tomaron la acusación", manifestó la mujer.
La mujer también relató que, mientras la violaban, "ningún vecino acudió en su defensa ante los gritos de ayuda".
"La oían gritar, pero como no la conocen, porque hace un mes que vive ahí en una casita muy precaria, pensaban que se estaba peleando con el marido", remarcó.
Asimismo, afirmó que "no le robaron nada porque no tiene nada; pero lamentablemente las hijitas fueron testigos de todos los abusos que padeció su madre".
Por último, sostuvo que "los vecinos estamos muy preocupados". "Hay mucha delincuencia en este barrio, siempre roban en las casas, pero como esto no había ocurrido nunca", añadió y, por último, dijo: "Los delincuentes caminan tranquilamente, con impunidad, porque la Policía no entra desde hace 40 años, cuando se conformó el barrio. Necesitamos urgente una intervención del Ejército o la Gendarmería Nacional".
Fuentes policiales revelaron que "el marido de la mujer amplió la denuncia porque sufrieron amenazas".
Según explicaron los voceros, la joven ultrajada denunció el calvario vivido en la Comisaría 3ra. de Quilmes Oeste y, por este motivo, los criminales "les advirtieron para que no metan a la policía", motivo por el cual se sospecha que los culpables de este hecho viven en el mismo barrio que los damnificados.
De acuerdo a su testimonio de una vecina, tras el ataque la mujer permaneció en estado de shock por varias horas, hasta que logró reunir fuerzas y se dirigió hasta la seccional de su jurisdicción, donde los efectivos policiales "no querían tomarle la denuncia porque no lo creían".
"Pensaban que era mentira lo de los tipos encapuchados, la hicieron esperar como ocho horas hasta que no tuvieron más remedio y le tomaron la acusación", manifestó la mujer.
La mujer también relató que, mientras la violaban, "ningún vecino acudió en su defensa ante los gritos de ayuda".
"La oían gritar, pero como no la conocen, porque hace un mes que vive ahí en una casita muy precaria, pensaban que se estaba peleando con el marido", remarcó.
Asimismo, afirmó que "no le robaron nada porque no tiene nada; pero lamentablemente las hijitas fueron testigos de todos los abusos que padeció su madre".
Por último, sostuvo que "los vecinos estamos muy preocupados". "Hay mucha delincuencia en este barrio, siempre roban en las casas, pero como esto no había ocurrido nunca", añadió y, por último, dijo: "Los delincuentes caminan tranquilamente, con impunidad, porque la Policía no entra desde hace 40 años, cuando se conformó el barrio. Necesitamos urgente una intervención del Ejército o la Gendarmería Nacional".