Tensión en Santa Cruz: gremialistas mantuvieron encerrados 15 horas a funcionarios en Río Turbio
Denuncian que hay "zona liberada" y que el gobierno de Alicia Kirchner no interviene.
Gremialistas de la mina de carbón de Río Turbio secuestraron durante 15 horas a funcionarios públicos, golpearon a policías y a un oficial de Justicia, atacaron la casa del interventor Omar Zeidán y amenazaron a familiares de este último funcionario. "Esto es tierra de nadie, anarquía y un estado de inacción total. Hago responsable a la Alicia Kirchner", afirmó el interventor, al denunciar los últimos episodios ocurridos el fin de semana.
Se trata de al menos tres episodios de violencia ocurridos en las últimas horas, que involucraron a mineros que responden al sindicato de ATE-Santa Cruz y que fueron acusados por las autoridades de la mina.
Uno de los hechos más graves fue el virtual secuestro por más de 15 horas de seis funcionarios de la intervención y de un jefe de Gendarmería, en una protesta contra despidos dispuestos sobre personal vinculado a la anterior administración. El ex ministro Julio De Vido está procesado por desvío de fondos.
Los funcionarios y el gendarme fueron liberados ayer a alrededor de las 6 del domingo pasado. "Quedaron privados de su libertad por varias horas. Les cortaron la luz, el agua y el gas, e inundaron toda la casa. Hago responsable de lo que está pasando a Alicia Kirchner", sostuvo Zeidan en declaraciones al canal Todo Noticias.
"Esto no es de la sociedad de Río Turbio, no es de los mineros, sino que es un grupo de inadaptados que están defendiendo los privilegios de unos pocos. Y nosotros tenemos una empresa que necesita producir y hoy está paralizada".
Zeidán sostuvo que los mineros mantuvieron "en calidad de rehenes" a seis funcionarios de la empresa, entre ellos el coordinador General Sergio Lumachi, y otros subgerentes, además del jefe del Escuadrón 43 de Gendarmería Nacional, José Luis Arguello, quien había acudido al lugar "para interiorizarse de lo que estaba ocurriendo".
El interventor de YCRT sostuvo en su comunicado que "personajes de dudosa moral, envalentonados en la impunidad que les brindan políticamente sectores vinculados con el kirchnerismo" entraron a las casas 50 y 51, donde "rompieron todo". Además "inundaron la casa del interventor mediante una manguera que pasaron por la chimenea escurriendo cientos de litros de agua por varias horas".
El otro hecho que denunció el interventor fue el ataque a los policías que habían ido a controlar los incidentes y tratar de liberar a los funcionarios secuestrados. "Le pegaron a un subcomisario y a un fiscal que habían sido enviados por la Justicia, después de una denuncia", reveló Zeidán, quien también sufrió el ataque a su propia casa.
La vivienda del interventor, según él mismo lo denunció, recibió pedradas, pintadas y daños, al tiempo que también fue amenazado el padre del funcionario, que vive en Río Turbio. De hecho, circularon varios mensajes por teléfonos celulares llamando a acudir a esa propiedad "con palos y las caras tapadas".
"Hago responsable a la gobernadora Alicia Kirchner. Es evidente que la Policía provincial ha liberado la zona para que actúen delincuentes disfrazados de dirigentes gremiales, que usan la noble causa de los mineros para sembrar el caos y la desolación en la cuenca", insistió Zeidán.