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Tenían razón, la democracia está en riesgo

* Por Hernán Dearriba. Al final, el conglomerado opositor tenía razón: la democracia está debilitada. El problema es que parten de un error de diagnóstico porque la fragilidad no parece responder a las razones que esgrimieron la semana pasada, sino a la imposibilidad de parir una oposición que se transforme en alternativa de poder.

Con la lógica del dueño de la pelota que suspende el partido cuando va perdiendo, Julio Cobos anunció ayer que no participará de las internas abiertas de agosto. "En estas condiciones no compito", soltó el autor del voto no positivo, intentando instalar la idea de que puede haber algo poco claro. El verdadero motivo que lo empujó es el reconocimiento de que la sociedad que lo encumbró al calor de "la guerra gaucha" empujada por los grandes medios, lo sumió hoy en la intrascendencia. Se suma así a la caída en desgracia de Ernesto Sanz, que ideó la interna radical, pero se dio a la fuga antes del primer cañonazo. Mauricio Macri convoca a la unidad opositora para conseguir que todos lo voten a él. "Somos el 60%", dice. Fernando "Pino" Solanas, que había anunciado su postulación presidencial, ahora parece dispuesto a "sacrificarse" por los militantes para bajar a la Ciudad. A cambio, pide que Hermes Binner rompa con Raúl Alfonsín, que quedó como único candidato de la UCR. El Peronismo Federal no vive una realidad muy distinta. Tras las defecciones de Felipe Solá –hay que reconocerle la capacidad de reacción porque fue el primero en distanciarse– y Mario Das Neves, un hombre de palabra que cumplió con su compromiso de apearse en caso de una derrota en su tierra, la interna quedó reducida al pintoresco cuadro de Eduardo Duhalde y Alberto Rodríguez Saá. El primer turno en la Ciudad se resolvió con dos radio-taxis y un par de urnas en un ascensor, lejos de la movilización que promete el ex presidente para volver a la Casa Rosada, esta vez por la vía de los votos. Al principio parecía un exceso pero, ante semejante panorama, no quedará más que coincidir con quienes firmaron el documento y ponerse en alerta por la democracia.