“Tengo la ilusión de ser campeón”
El DT de Racing, Miguel Ángel Russo, es consciente de cómo se reforzó Racing y por eso entiende al público académico, que está esperanzado con un nuevo título.
El entrenador de Racing, Miguel Ángel Russo, manifestó hoy que mantiene "todos los días la ilusión de ser campeón" del torneo Apertura 2010, y considera que su equipo va "de menor a mayor" en busca de ese objetivo.
"Alimentamos esa ilusión todos los días. Entiendo las expectativas de la gente y convivimos dentro de un club grande. Trabajamos para estar bien en lo táctico, lo físico y lo anímico, por lo que estoy confiado en poder superar los escollos sin apartarnos de lo preestablecido para llegar a lo más alto", expresó Russo.
El director técnico agregó que no buscará desesperadamente conseguir un reemplazante para el mediocampista externo Iván Pillud, quien se fracturó el quinto metatarsiano del pie derecho en el amistoso del sábado pasado ante San Lorenzo y estará al menos dos meses inactivo.
"Pillud conoce bien la banda derecha y es una baja importante. Debemos acomodarnos y suplir su ausencia hasta que esté en condiciones de regresar. Yo había apostado a jugar por los laterales. Si aparece algo en el mercado y nos conviene, por ahí incorporamos algún futbolista en ese puesto", declaró.
Por su parte, en cuanto a una de sus grandes esperanzas, el enganche Giovanni Moreno, remarcó: "Se está adaptando muy bien a las presiones del fútbol argentino. Debemos tenerle la paciencia necesaria y saber rodearlo bien dentro de la cancha. Tiene talento, condiciones técnicas, ambición, potencia en el arranque y sacrificio. Debemos aprovechar las faltas que genera y enriquecer con sus cualidades el juego colectivo".
Con respecto a la situación de Pablo Lugüercio, quien estuvo cerca de irse a Banfield debido a que ya no es más titular indiscutido en “La Academia”, advirtió que "hace un mes dejé en claro en una charla con Pablo que lo iba a tener en cuenta”.
Finalmente, Russo se refirió a su posibilidad de dirigir al seleccionado argentino a partir de enero próximo: "Me preparo día a día para tener una chance de esa magnitud. Trato de madurar permanentemente y de estar listo para cuando se dé. Siempre arriesgué en mi trabajo y desde que me quedé afuera del Mundial de México 1986 (el 31 de marzo de ese año) tengo la esperanza de disponer de una revancha", concluyó.
"Alimentamos esa ilusión todos los días. Entiendo las expectativas de la gente y convivimos dentro de un club grande. Trabajamos para estar bien en lo táctico, lo físico y lo anímico, por lo que estoy confiado en poder superar los escollos sin apartarnos de lo preestablecido para llegar a lo más alto", expresó Russo.
El director técnico agregó que no buscará desesperadamente conseguir un reemplazante para el mediocampista externo Iván Pillud, quien se fracturó el quinto metatarsiano del pie derecho en el amistoso del sábado pasado ante San Lorenzo y estará al menos dos meses inactivo.
"Pillud conoce bien la banda derecha y es una baja importante. Debemos acomodarnos y suplir su ausencia hasta que esté en condiciones de regresar. Yo había apostado a jugar por los laterales. Si aparece algo en el mercado y nos conviene, por ahí incorporamos algún futbolista en ese puesto", declaró.
Por su parte, en cuanto a una de sus grandes esperanzas, el enganche Giovanni Moreno, remarcó: "Se está adaptando muy bien a las presiones del fútbol argentino. Debemos tenerle la paciencia necesaria y saber rodearlo bien dentro de la cancha. Tiene talento, condiciones técnicas, ambición, potencia en el arranque y sacrificio. Debemos aprovechar las faltas que genera y enriquecer con sus cualidades el juego colectivo".
Con respecto a la situación de Pablo Lugüercio, quien estuvo cerca de irse a Banfield debido a que ya no es más titular indiscutido en “La Academia”, advirtió que "hace un mes dejé en claro en una charla con Pablo que lo iba a tener en cuenta”.
Finalmente, Russo se refirió a su posibilidad de dirigir al seleccionado argentino a partir de enero próximo: "Me preparo día a día para tener una chance de esa magnitud. Trato de madurar permanentemente y de estar listo para cuando se dé. Siempre arriesgué en mi trabajo y desde que me quedé afuera del Mundial de México 1986 (el 31 de marzo de ese año) tengo la esperanza de disponer de una revancha", concluyó.