Taxi boys: ¿sexo y muerte?

Luego de conocerse que un taxi boy brasileño quedó detenido acusado de haber asesinado de 40 puñaladas a un empresario en su departamento de Las Cañitas durante un encuentro sexual, crece la idea que detrás de los trabajadores "de la noche" hay una historia de violencia y muerte.

En ese sentido, en el programa "Chiche en Vivo" estuvo un taxi boy, llamado Juan Carlos, el psiquiatra Hugo Marietan y el criminalista Raúl Torre, quienes analizaron la realidad de la profesión.

El trabajo de un taxi boy, en primera persona

Juan Carlos: "En realidad inicie mi trabajo exclusivo para mujeres, y después empecé a laburar en boliches gay. Cuando uno trabaja en un boliche para hombres, siempre está la oferta. Al principio dije que no, pero no siempre se paga para tener sexo. Hay veces que te pagan para verte masturbarte".

"El hombre es el que más consume el servicio. Creo que en el caso de la mujer no busca el servicio por miedo y por no pagar. La mujer es más pudorosa en ese tema. Tanto para tener sexo con un hombre como para hacer un show tengo que estar excitado. Si tengo que trabajar por placer, elijo a una mujer. Pero en la profesión no tengo problema".

"Las primeras veces tuve pudor, pero el asunto lo manejo yo, no dejo que me maneje el cliente. El cliente me viene a buscar, pero yo digo sí o no. El cliente se puede poner violento pero yo lo manejo, aunque algunos chicos no pueden. Hay de todo, pero eso queda en la personalidad de cada uno. He tenido discusiones con clientes, sin llegar a los golpes, pero tengo conocidos que llegaron a la violencia".

"En los casos de violencia, puede ser que se haya arreglado una tarifa y no se abona lo acordado, o que el servicio no fue el arreglado. También está involucrado el consumo de alcohol o drogas. Yo particularmente no consumo ni alcohol ni drogas durante mi labor, el cliente si quiere consumir alcohol puede, pero yo no, me mantengo sobrio durante el trabajo".

"Hay chicos que trabajan privado y hay otros que laburan en la calle, que están en una esquina y esperan que lo levanten en la calle. Si me contactan para una fiesta colectiva, solo voy si conozco a los demás chicos, sino no voy".

¿Cómo es la "cabeza" de un taxi boy?

Marietán: "El taxi boy no tiene una patología, sino que tiene una inclinación especial. No todos los varones pueden hacer esta actividad, porque hay que poder erotizarse con otro hombre. El varón común rechaza la posibilidad de estar con otro varón porque no se excita con otro hombre".

"No solamente es un control mental, sino una tendencia a colocarse en ese tipo de situaciones. De ser un stripper, en una serie de exhibicionismo, pasó a trabajar con los homosexuales. Con esta actividad no hay que tener rechazo en los varones. Se tiene una inclinación hacia la homosexualidad activa".

"Por lo general los activos no se asumen como homosexuales, porque a lo mejor es un mecanismo de defensa".

"La violencia es una porción muy menor dentro de la actividad del taxi boy. Puede existir como un accidente, porque uno contrata a un taxi boy, y puede ser además un delincuente o un homicida. Ese resentimiento aplicado directamente hacia la violencia es muy infrecuente, no creo que el taxi boy ataque por envidia a su cliente".

La historia criminal de los taxi boy

Raúl Torre: "Nosotros hemos tenido, sin entrar en colisión con el doctor Marietan, una multiplicidad de hechos, en el binomio 'taxi boy - gay'. Yo no voy a condenar a todos los taxi boys como que participen en esta actividad criminal, pero una gran mayoría se involucran en esta violencia y han llegado al máximo que es el asesinato".

"Este tipo de delitos se encuentra intramuros y se encierran en la intimidad".

"Además, muchos gays por pudor no admiten que consumen este tipo de servicio, y eso hace que muchos delitos queden en la impunidad. Nosotros terminamos conociendo aquellos hechos que terminan en el homicidio".