Superhombre hipnotiza tiburones blancos con sólo tocarlos
Un buzo sudafricano descubrió un modo para llevar al mayor depredador de los mares y océanos, a un trance placentero. Mirá el increíble video.
El tiburón blanco, el mayor depredador de los mares y océanos, es un auténtico peligro para toda especie viva que le rodea, hasta ahora.
Según el sitio PijamaSurf, Andre Hartman, un experimentado buzo sudafricano descubrió un modo de controlar a los tiburones y convertirlos en amigables animalitos marinos.
En una ocasión, Andre fue atacado por un espécimen y, sin querer y por fortuna, descubrió el punto del poder. Con sólo tocarles una zona cercana a su peligrosa mandíbula, en el hocico, los tiburones entran en un estado hipnótico.
Mediante un "masaje" un tiburón llega a un trance, dado que su hocico es una zona llena de terminaciones nerviosas que al ser tocada, produce una inundación de estímulos que lo embelesa.
"El tiburón parece entrar a un estado placentero, pero confuso, en el que busca la fuente del estímulo como si estuviera soñando. Así que no hay detonador para que ataque algo", explicó Hartman.
El estado al que llegan los tiburones, conocido como "inmovilidad tónica", es similar al que sienten cuando están apareándose y dura unos quince minutos.
¿Te animarías a comprobarlo?
Según el sitio PijamaSurf, Andre Hartman, un experimentado buzo sudafricano descubrió un modo de controlar a los tiburones y convertirlos en amigables animalitos marinos.
En una ocasión, Andre fue atacado por un espécimen y, sin querer y por fortuna, descubrió el punto del poder. Con sólo tocarles una zona cercana a su peligrosa mandíbula, en el hocico, los tiburones entran en un estado hipnótico.
Mediante un "masaje" un tiburón llega a un trance, dado que su hocico es una zona llena de terminaciones nerviosas que al ser tocada, produce una inundación de estímulos que lo embelesa.
"El tiburón parece entrar a un estado placentero, pero confuso, en el que busca la fuente del estímulo como si estuviera soñando. Así que no hay detonador para que ataque algo", explicó Hartman.
El estado al que llegan los tiburones, conocido como "inmovilidad tónica", es similar al que sienten cuando están apareándose y dura unos quince minutos.
¿Te animarías a comprobarlo?