Su compañero de trabajo lo atacó con grasa caliente mientras dormía y murió tras agonizar por 17 días

Tras agonizar durante 17 días murió un panadero de Rosario, a quien un compañero de trabajo, que está prófugo y es intensamente buscado por las fuerzas policiales, lo atacó arrojándole grasa caliente en la cara.

La víctima, identificada como Sofiudin José Jahari, de 47 años, murió el lunes pasado, pero el caso trascendió este viernes ante el insistente reclamo de familiares y amigos de la víctima para que el agresor sea detenido y juzgado.

La fiscalía de turno en el Ministerio Público de la Acusación (MPA) ya emitió el pedido de captura del agresor, quien era compañero de trabajo de Jahari y fue identificado como Miguel Alejandro Martínez, de 30 años.

“El miércoles 7 de diciembre mi tío José se encontraba en su lugar de trabajo: una panadería de Rosario. Casi terminando su horario laboral se recostó y mientras dormía un compañero le tiró un balde de grasa hirviendo en el rostro y gran parte de su cuerpo”, relató su sobrina, Oriana, en comentarios que publicó a manera de denuncia en las redes sociales.

El relato de la joven fue confirmado por los investigadores, quienes acreditaron que Sofiudin Jahari se disponía a descansar un momento antes de la finalización de su jornada laboral, en la panadería ubicada en Santiago al 4700, cuando Martínez, sin mediar palabra le arrojó un recipiente lleno de grasa caliente en el rostro y parte del cuerpo, para luego darse a la fuga.

La víctima fue trasladada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, donde fue asistido por diversas quemaduras y permaneció internado hasta pasado lunes, cuando falleció producto de la gravedad de las lesiones. Desde la fiscalía solicitaron colaboración para dar con el autor de este brutal crimen sobre el cual pesa un pedido de captura.

Por su parte, Melina Cimino, abogada de la familia de la víctima, aseguró que lo sucedido “es un homicidio agravado por alevosía, totalmente premeditado”, aunque no aportó detalles. La abogada también recordó que el sospechoso le había preguntado a otros compañeros cuándo llegaba José.

Entre los familiares del agredido se indicó que “a nadie le hacía sospechar problemas graves entre ambos. Sí celos laborales”, según manifestaron.

Martínez, el atacante, vive en Rosario y después de ser el protagonista de lo sucedido en la panadería donde trabajaba junto a Jahari, en la zona sur de aquella ciudad del sur santafecino, no volvió al trabajo ni a su residencia.

A la hora de analizar el video de las cámaras de seguridad, la abogada Cimino precisó que había un tercer empleado cuando Jahari recibió el baldazo de grasa hirviendo.

Mientras la víctima intentaba calmar el dolor y pedía ayuda, Martínez agarró su moto y se fue del local. Desde entonces, la Justicia no pudo determinar su paradero.

Jahari sufrió lesiones graves en los riñones y las quemaduras también le afectaron la vista. Mientras estuvo internado, padeció arritmias constantes y lo operaron dos veces. La familia le agradeció al personal del Heca por el trabajo constante para cuidarlo.

En las últimas horas, personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) realizó diversos operativos para dar con el paradero del ahora convertido en homicida.