"Soy un romántico, tuve pocas novias pero buenas"

A la influencia de una infancia marcada a fuego por la leyenda de su madre, la inefable Lolita Torres, Diego le sumó su talento como cantante, compositor y actor, y la inteligencia para moverse en el ambiente artístico en forma ascendente sin descuidar su vida privada. Es el más chico de cinco hermanos; familiero, nada divo y hombre de parejas larga vida. Multipremiado y con fama bien ganada en el exterior, él distingue entre éxito y exitismo: "Al éxito se llega con mucho trabajo creativo y sensatez para mantenerlo, sin que estalle y te pierdas con él", explica. Y después de siete años vuelve al cine, con una comedia de romance y misterio, "Extraños en la noche", donde interpreta a un ídolo musical. Rodeado de un quisquilloso equipo que lo asiste, pide sushi, un corte de pelo y agua mineral, y se entrega distendido a la charla.

Noticias: Está demostrado que la intuición es una fuente de conocimiento tan válida como la razón. Hay personas capaces de captar la verdad sin que medie lo racional. ¿Intuyó su camino de artista?

Diego Torres: Tuve lo artístico tan en mi esencia, esto de bailar y cantar, actuar, tocar el piano... Estar en el comedor grande de casa y sentirlo como un teatro, lleno de artistas, compañeros de mamá, y ella ensayando. advertí que casi era un mandato. Y me sentí predestinado para la actuación. Sin embargo, la cosa empezó azarosa. Acompañé a mi hermana Mariana –la que me sigue a mí– a un casting y me eligieron a mí, a ella no. Y fui rodando, haciendo kilometraje por la vida y usando la intuición para tomar decisiones. Sería cantante y actor, iría por las dos cosas, sin resignar una por otra. Con la intuición encaminé el destino.