DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

Solidaridad y desmentida ante denuncia de joven que busca a su madre

La joven Gisela Di Vincenzo, que denunció públicamente que la robaron y vendieron al nacer, se encontró con numerosos llamados de solidaridad, algunos que dieron pistas erróneas de su mamá, y con la respuesta de un abogado que representa a la mujer que ella denuncia como la responsable de su venta.

El testimonio de la joven de 37 años, que busca desesperadamente a su madre, da cuenta de que tras una discusión con la que creía que era su madre biológica "hace un año y medio, me enteré de que una red de `trata de personas` me vendió al nacer, y que a mi mamá le dijeron que había tenido un varón que había nacido muerto".

La joven comenzó a investigar y a confrontar versiones y datos, tras lo cual formuló la denuncia y se abrió una causa en el juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 2, de Marcelo Martínez de Giorgi.

En su denuncia, la joven menciona el lugar donde "mi papá `adoptivo` fue a buscarme y quién fue la persona que me vendió", y dice que "se llama Nelly Urbina alias `la chilena`, pero en realidad es santiagueña y se llama Ramona Nélida Serrano y hoy tiene 76 años".

Tras la denuncia pública, Gisela recibió "algunos llamados de un señor que aparentemente sabía algo pero después me dijeron que desvaría, y también llamó una mujer que me agredió; al mismo tiempo mucha gente se acercó solidarizándose y otros planteando casos similares al mío".

Por su parte, el abogado Diego Pelegrino que representa a la mujer que denunció Gisela, negó en un comunicado "cualquier vinculación entre los hechos denunciados y las personas de Ramona Nélida Serrano y/o Nelly Urbina que en primer lugar son dos personas distintas, es decir, la primera es madre de la segunda".

"En segundo término -continúa- debemos ahondar en la negativa anterior, respecto de Nelly Urbina, ya que, en el año 1973, tal la fecha en que Gisela fuera supuestamente vendida, Nelly contaba con sólo 13 años de edad".

El abogado precisó que "lamentamos la triste situación de Gisela, pero de ninguna manera podemos quedarnos de brazos cruzados frente a tantas mentiras, sobre las que ignoramos el origen y el fin que en última instancia persiguen".

Advirtió que la mujer denunciada "nada tiene que ver con los hechos relatados por Gisela Di Vincenzo, ni siquiera, remotamente, ya que en el caso de Ramona, se trata de una persona que ha llevado a través de los años una vida humilde, de trabajo, a la vista de todos, sin dobleces".

Se refiere, asimismo, a otros aspectos de la denuncia de Gisela donde detalla información dada por Gisela que "es utilizada de manera errónea".

 "La gravedad del caso -enfatiza en relación a la denuncia pública contra la mujer que representa- llega al hecho de haber increpado a Ramona Serrano en la calle, y dado que se trata de una mujer de 73 años, sólo la invade el miedo por las calumnias recibidas".

El abogado apela a las garantías constitucionales al referir que el principio de inocencia e intimidad entre otros "se encuentran gravemente lesionados" por el modo en que se presentó esta denuncia.