Soja: una cosecha que rendirá menos
*Por El Mundo. Este mes ha llovido como pocas veces antes, pero las precipitaciones llegaron a la zona de mayor rendimiento agrícola cuando ya era tarde.
Por esta causa, los expertos estiman que la cosecha de soja en el norte de la provincia de Buenos Aires y en gran parte de la provincia de Córdoba rondará los 43 millones de toneladas y no los 52 millones de toneladas que estaban previstos. Si a esa merma se suman las pérdidas en maíz, otro de los cultivos estrella, la caída superaría los 12 millones de toneladas.
Ernesto Ambrosetti, economista jefe del Instituto de Estudios Económicos de la Sociedad Rural, calcula que por efecto de la sequía (o de las lluvias a destiempo) se dejarán de exportar unos 40.000 millones de dólares en granos y cereales. A su vez, el Estado perderá cerca de 1.200 millones de dólares en concepto de impuesto a las exportaciones.
"La situación de los pequeños productores es más que crítica. Ellos tendrán que endeudarse para pagar los créditos que tomaron al comienzo de la campaña 2011-2012 y serán pocos los que puedan adquirir insumos para nuevos cultivos", enfatizó Ambrosetti.
Cómo si esto fuera poco, la presidenta Cristina Kirchner advirtió que el Gobierno no se hará cargo de las pérdidas ocasionadas por la sequía. La gobernante sostiene que con las lluvias de las últimas semanas es exagerado hablar de sequía y menos se puede pedir que el núcleo agrícola sea declarado zona de catástrofe.
La Presidenta rechazó los pedidos de ayuda de los agricultores diciendo que si fuesen precavidos, habrían gestionado las debidas pólizas de seguro, un argumento rechazado desde las organizaciones rurales.
Ernesto Ambrosetti, economista jefe del Instituto de Estudios Económicos de la Sociedad Rural, calcula que por efecto de la sequía (o de las lluvias a destiempo) se dejarán de exportar unos 40.000 millones de dólares en granos y cereales. A su vez, el Estado perderá cerca de 1.200 millones de dólares en concepto de impuesto a las exportaciones.
"La situación de los pequeños productores es más que crítica. Ellos tendrán que endeudarse para pagar los créditos que tomaron al comienzo de la campaña 2011-2012 y serán pocos los que puedan adquirir insumos para nuevos cultivos", enfatizó Ambrosetti.
Cómo si esto fuera poco, la presidenta Cristina Kirchner advirtió que el Gobierno no se hará cargo de las pérdidas ocasionadas por la sequía. La gobernante sostiene que con las lluvias de las últimas semanas es exagerado hablar de sequía y menos se puede pedir que el núcleo agrícola sea declarado zona de catástrofe.
La Presidenta rechazó los pedidos de ayuda de los agricultores diciendo que si fuesen precavidos, habrían gestionado las debidas pólizas de seguro, un argumento rechazado desde las organizaciones rurales.