Sin cambios: tras el congelamiento de los precios, los productos siguen subiendo

Una primera medición después del "congelamiento" de precios mostró que una canasta de 38 productos relevados se incrementó sólo un 0,28% durante la primera quincena de febrero. Sin embargo, 19 de los 28 productos continuaron subiendo después del 1° de febrero, cuando los supermercados informaron que no habría más ajuste.
 

El relevamiento fue hecho por "Consumidores Libres", la entidad encabezada por el ex legislador socialista Héctor Polino, que fue suspendida por el Registro de Entidades de Defensa del Consumidor por una decisión de Guillermo Moreno.

 

Los productos que encabezaron el aumento fueron las verduras y productos frescos, como el kilo de zapallo anco (subió un 6,06%), cebolla (5,36%), pan común (4,62%), banana (2,68%) y acelga (2,5%). También se detectaron aumentos en la manteca (el paquete de 200 gramos subió un 3,28%), café (el cuarto kilo de La Morenita subió un 3,06%) o el medio kilo de queso Port Salut (2,70% de alza), según publicó el diario Clarín.

La canasta básica acumula un incremento del 1,93% desde comienzos del año, según Polino. Los productos que más subieron este años son el kilo de acelga (20,98%), cebolla (13,46%), pan común (11,48%), tomate perita (9,84%), naranja (9,09%), banana (8,49%), aceite Cocinero (5,99%), kilo de falda (5,72%) y pollo (5,66%).

Entre los productos que bajaron, según el muestreo hecho en algunas sucursales de Coto, Plaza Vea y distintos comercios de la Boca, Caballito, Liniers y Pompeya son el arroz fino, gran Cóndor (bajó un 5,77%, acumula una caída anual de 6,67%), el azúcar Ledesma (cayó un 5,20% en febrero, aunque en el acumulado anual sigue estando 4,16% más cara), el kilo de papa (4,2%, una baja acumulada del 7,12%), el kilo de asado (3,76%), manzana (3,65% de retroceso en febrero, con baja anual de 4,35%), agua sin gas Villavicencio de litro y medio (disminuyó 3,5% en febrero, pero en el anual retrocedió un 1,19%).

"Un compromiso de congelamiento por 60 días es una buena noticia. Pero hay que ver qué pasa. La inflación es una enfermedad terminal en la economía argentina y no se cura con una aspirina o con medidas de cortísimo plazo", evaluó Polino.

La consultora Econométrica observa que el congelamiento puede ser un "arma de doble filo". "No se conocen los precios de referencia, con lo cual es difícil corroborar la efectividad desde el precio base 'pre-congelamiento'. Además, queda la duda de lo que vaya a suceder con las promociones con tarjetas de crédito y débito que se volvieron una costumbre muy arraigada entre los consumidores, y cuya eliminación o reducción pueden significar un golpe al bolsillo incluso más fuerte que el aumento de precios de los últimos meses", advierten. El día "61" y el comportamiento sindical siguen siendo claves para saber cómo sigue la película.