Siguen complicadas las exportaciones
* Por Luis A. Fermosel. Hubo una reunión entre dirigentes de la Coviar y los gobiernos de las provincias vitivinícolas para que estos profundicen los planteos ante el Ejecutivo nacional.
No hay caso, por más pedidos que se realicen y gestiones, pareciera ser que resulta muy difícil que los funcionarios nacionales tomen conciencia de las graves consecuencias que provocan algunas medidas que aplican.
Porque la modificación que salió días atrás, señalando que la decisión de que los dólares por las ventas de vinos al exterior excluía a las pequeñas y medianas empresas (las que exportan hasta 2 millones de dólares al año), terminó siendo un pequeñísimo paliativo, en razón de que alcanza a sólo el 13 por ciento de las ventas totales de vinos exportados.
Mientras tanto, nuestra principal industria sigue sumando inconvenientes. Como, por ejemplo, la decisión de Brasil de prohibir el ingreso de pasas de uva a ese país, aduciendo problemas sanitarios.
Quienes sí se han preocupado han sido los gobiernos provinciales, que el jueves se reunieron con los integrantes de la Coviar. Los asistentes realizaron un diagnóstico de la situación y acordaron concurrir al más alto nivel del Gobierno nacional, incluyendo a la propia Presidenta de la Nación. En este último caso, se indicó que el gobernador de San Juan aprovechó el viaje a Angola para expresarle los inconvenientes a Cristina Fernández.
"El problema es grave y hay empresas que han decidido suspender sus exportaciones, razón por la cual se afectará el empleo", dijo uno de los asistentes, mientras otro señaló que "lo que está ocurriendo es muy grave, porque las ventas que dejaremos de hacer nosotros en los mercados externos serán ocupados por otros países".
Siempre dentro del mismo tema, un bodeguero señaló que resulta absurdo creer que las empresas demoren ex profeso el ingreso de divisas. "Los primeros interesados en recuperar la plata somos nosotros, porque nos hace falta capital de trabajo para seguir con las tareas en las bodegas. No conocemos lo que sucede con otras exportaciones y mucho menos con las de la Pampa Húmeda, pero en el caso de la vitivinicultura, eso (quedarse con los dólares) no existe", dijo, para agregar que "en el comercio exterior se respetan los plazos. ¿Cómo le digo a mis clientes que tengo que devolver los dólares a los 60 días cuando habíamos firmado por 120 ó 180 días?"
Otro de los temas que concentró la atención fue la decisión de Brasil de suspender el ingreso de pasas de uva y uva en fresco (en este último caso no habría problemas hasta la próxima cosecha) por problemas sanitarios.
Según se supo, la situación no afecta sustancialmente a Mendoza, porque tiene muy poca producción de pasas, pero no sucede lo mismo en San Juan, en razón de que el 80 por ciento de la producción de ese producto tiene como destino Brasil.
"Las empresas tenían todo previsto y la semana que viene empezaban a exportar. Más aún, tenemos todo pagado con cheques y resulta que ahora nos frenan las exportaciones", dijo un dirigente de la vecina provincia.
El propio gobernador sanjuanino, José Luis Gioja, se refirió al tema durante el viaje que realizó a Angola junto con la delegación argentina Gioja dijo que se podría destrabar la situación, a cambio de permitir el ingreso a la Argentina de algunos productos, como la carne porcina.
También se supo que los negociadores se han puesto un plazo de 120 días para acordar las diferencias y normalizar la situación, lo que motivó también una reflexión de parte de algunos exportadores. "Vamos a tener que esperar tres meses y ¿qué le decimos a la gente con la que tenemos nuestras obligaciones?", dijeron.
Los sectores lamentan lo que está ocurriendo en razón de que el comercio internacional es favorable para la Argentina. A modo de ejemplo, puede indicarse que una publicación española especializada en la industria vitivinícola señaló que el vino europeo está ganando peso en el mercado internacional del vino frente a las producciones de otros países del hemisferio sur que pierden protagonismo, como Sudáfrica, Chile o Australia, "con la excepción de la Argentina, que aumenta sus cifras exportables tanto en volúmenes como en precios".
Dice más adelante que entre los vinos del denominado Nuevo Mundo Vitivinícola "es Argentina quien mejor comportamiento exportador presenta en el último año, con un aumento del 26 por ciento en valor y del 7,3 por ciento en volumen".
Es preocupante entonces lo que está sucediendo con las decisiones adoptadas por el Gobierno nacional, que parece no comprender lo que sucede con una industria tan importante y en permanente crecimiento como la vitivinícola y que es tomada como ejemplo para otras actividades.
Por ese motivo también, la Corporación Vitivinícola fue invitada para el 29 del actual al Senado de la Nación para exponer allí las virtudes del Plan Estratégico 2020 y explicar la situación de la industria.
Porque la modificación que salió días atrás, señalando que la decisión de que los dólares por las ventas de vinos al exterior excluía a las pequeñas y medianas empresas (las que exportan hasta 2 millones de dólares al año), terminó siendo un pequeñísimo paliativo, en razón de que alcanza a sólo el 13 por ciento de las ventas totales de vinos exportados.
Mientras tanto, nuestra principal industria sigue sumando inconvenientes. Como, por ejemplo, la decisión de Brasil de prohibir el ingreso de pasas de uva a ese país, aduciendo problemas sanitarios.
Quienes sí se han preocupado han sido los gobiernos provinciales, que el jueves se reunieron con los integrantes de la Coviar. Los asistentes realizaron un diagnóstico de la situación y acordaron concurrir al más alto nivel del Gobierno nacional, incluyendo a la propia Presidenta de la Nación. En este último caso, se indicó que el gobernador de San Juan aprovechó el viaje a Angola para expresarle los inconvenientes a Cristina Fernández.
"El problema es grave y hay empresas que han decidido suspender sus exportaciones, razón por la cual se afectará el empleo", dijo uno de los asistentes, mientras otro señaló que "lo que está ocurriendo es muy grave, porque las ventas que dejaremos de hacer nosotros en los mercados externos serán ocupados por otros países".
Siempre dentro del mismo tema, un bodeguero señaló que resulta absurdo creer que las empresas demoren ex profeso el ingreso de divisas. "Los primeros interesados en recuperar la plata somos nosotros, porque nos hace falta capital de trabajo para seguir con las tareas en las bodegas. No conocemos lo que sucede con otras exportaciones y mucho menos con las de la Pampa Húmeda, pero en el caso de la vitivinicultura, eso (quedarse con los dólares) no existe", dijo, para agregar que "en el comercio exterior se respetan los plazos. ¿Cómo le digo a mis clientes que tengo que devolver los dólares a los 60 días cuando habíamos firmado por 120 ó 180 días?"
Otro de los temas que concentró la atención fue la decisión de Brasil de suspender el ingreso de pasas de uva y uva en fresco (en este último caso no habría problemas hasta la próxima cosecha) por problemas sanitarios.
Según se supo, la situación no afecta sustancialmente a Mendoza, porque tiene muy poca producción de pasas, pero no sucede lo mismo en San Juan, en razón de que el 80 por ciento de la producción de ese producto tiene como destino Brasil.
"Las empresas tenían todo previsto y la semana que viene empezaban a exportar. Más aún, tenemos todo pagado con cheques y resulta que ahora nos frenan las exportaciones", dijo un dirigente de la vecina provincia.
El propio gobernador sanjuanino, José Luis Gioja, se refirió al tema durante el viaje que realizó a Angola junto con la delegación argentina Gioja dijo que se podría destrabar la situación, a cambio de permitir el ingreso a la Argentina de algunos productos, como la carne porcina.
También se supo que los negociadores se han puesto un plazo de 120 días para acordar las diferencias y normalizar la situación, lo que motivó también una reflexión de parte de algunos exportadores. "Vamos a tener que esperar tres meses y ¿qué le decimos a la gente con la que tenemos nuestras obligaciones?", dijeron.
Los sectores lamentan lo que está ocurriendo en razón de que el comercio internacional es favorable para la Argentina. A modo de ejemplo, puede indicarse que una publicación española especializada en la industria vitivinícola señaló que el vino europeo está ganando peso en el mercado internacional del vino frente a las producciones de otros países del hemisferio sur que pierden protagonismo, como Sudáfrica, Chile o Australia, "con la excepción de la Argentina, que aumenta sus cifras exportables tanto en volúmenes como en precios".
Dice más adelante que entre los vinos del denominado Nuevo Mundo Vitivinícola "es Argentina quien mejor comportamiento exportador presenta en el último año, con un aumento del 26 por ciento en valor y del 7,3 por ciento en volumen".
Es preocupante entonces lo que está sucediendo con las decisiones adoptadas por el Gobierno nacional, que parece no comprender lo que sucede con una industria tan importante y en permanente crecimiento como la vitivinícola y que es tomada como ejemplo para otras actividades.
Por ese motivo también, la Corporación Vitivinícola fue invitada para el 29 del actual al Senado de la Nación para exponer allí las virtudes del Plan Estratégico 2020 y explicar la situación de la industria.