Se viene el adiós de las libretas
En dos años dejarán de servir y sólo se podrá usar el nuevo DNI de plástico. Desde el Ministerio, calculan que unos 25 millones de personas deberán sacar la tarjeta antes de ese plazo.
El reloj se puso en marcha y las personas tienen un plazo de dos años para obtener el DNI tarjeta, que será desde ese momento, el único documento válido.
Cumplida esa fecha, no serán validas las libretas de enrolamiento, libretas cívicas, las tradicionales libretas verdes y también las nuevas libretas celestes.
Desde el Ministerio del Interior manifestaron que 25 millones de argentinos aún no tramitaron la tarjeta, que tiene plazo hasta 2014.
El objetivo de quitar las libretas de circulación en dos años se estableció de acuerdo a la demanda. Ya se digitalizaron 3.000 bocas de trámites en las que se inician 40.000 nuevos DNI por día. De sostenerse esa demanda necesitarán algo menos de dos años para documentar a los que faltan.
Los 15 millones de argentinos que ya hicieron el nuevo trámite gastaron75 millones de pesos en las libretas celestes que vencerán (costaban alrededor de 5 pesos cada una). De todas formas, la desaparición de la libreta no significa que deban hacer un nuevo documento ni volver a pagar, justamente porque con el trámite que ya hicieron también les enviaron la tarjeta plástica.
El nuevo límite de tiempo significa que todas las libretas servirán para votar, por última vez, en las elecciones legislativas del año próximo.
En tanto, las tarjetas que se emitieron hasta ahora y que tienen una leyenda que dice "no válido para votar" servirán igual. El gobierno les dará validez mediante una resolución.
"Vamos a proponerle a la Justicia Electoral que el padrón incluya un código de barras. De este modo, sólo con escanear el código de barras del DNI tarjeta y el código del padrón podrán ver al instante quién votó y quien no. La idea no es hacer una caza de brujas, pero lo cierto es que hoy, con el sistema de sellos, mucha gente no va a votar, después dice que perdió el DNI, tramita uno nuevo y nadie se entera", manifestó una fuente del ministerio.
De aprobarse la reforma, se entregarán dos troqueles: uno quedará pegado en el padrón y el otro lo tendrá el votante, aunque será sólo "una constancia para tranquilidad de la gente que está acostumbrada al sello". El registro de voto no será ése sino el que tome el lector de códigos de barras.