Se entregó novio de joven quemada
La pareja de una joven que permanece internada con graves quemaduras luego de haber sido rociada con alcohol, se entregó a la Policía y negó haber intentado matar a la mujer.
La pareja de una joven que permanece internada con graves quemaduras luego de haber sido rociada con alcohol en el partido bonaerense de San Martín se entregó a la Policía y negó haber intentado matar a la mujer, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.
Se trata de Marcos Cortez (33), quien se presentó en la comisaría primera de ese distrito y quedó detenido por la "tentativa de homicidio" de su pareja, Romina Soledad Olivera (27), que está internada en terapia intensiva.
El acusado fue conducido esta mañana ante la fiscal Amalia Belauzarán, negó haber cometido el hecho y dio otra versión de lo sucedido ese día, en una declaración indagatoria en la que fue asistido por un abogado particular, aseguraron fuentes judiciales.
Ahora, la fiscal tiene 15 días, prorrogables a un mes, para decidir si pide la prisión preventiva de Cortez, aunque una de las medidas que aguarda realizar es poder tomarle declaración a la víctima.
Teresa, madre de la chica, contó al canal Crónica TV que su hija sigue alojada en terapia intensiva de la clínica del Buen Pastor de Lomas del Mirador, donde se recupera de las quemaduras y le están realizando injertos de piel, por ejemplo en las manos.
Romina "tiene muy comprometidas las mamas, las axilas, los brazos, las manos", comentó la madre de la víctima, quien agregó que la joven se alimenta por sonda, pero come muy poco y está muy deprimida por lo sucedido.
El hecho ocurrió el 24 de marzo en una casa ubicada en 30 de octubre 3298, de José León Suárez, partido de San Martín, donde Olivera se hallaba con sus dos hijas, una bebita y otra de seis años.
Hasta allí llegó Cortez, de oficio plomero, con el cual mantenía una relación de mucha violencia y que incluía reiteradas separaciones y reencuentros, según pudieron determinar los investigadores.
Según relató la hija mayor de Olivera ante la Policía y luego a través del sistema de Cámara Gesell, el hombre llegó tras asistir a un cumpleaños de 15 y comenzó a golpear la puerta para ingresar, pero como Olivera se negaba, el hombre amenazó con matarla y ella accedió.
Una vez adentro de la casa, según la versión de la niña, el hombre agarró de los pelos a Romina, la golpeó contra una pared -lo cual le provocó la rotura de los dientes- y después la roció con alcohol y le prendió fuego.
Después de prenderla fuego, el agresor tiró a su pareja en la cama y la cubrió con una sábana, lo cual le provocó quemaduras en el 40 por ciento del cuerpo.
La nena de 6 años salió a pedir auxilio a los vecinos a los gritos y una ambulancia trasladó a la víctima al hospital Eva Perón de San Martín.
Teresa aseguró que su hija, pese a lo poco que puede hablar, le confirmó la misma versión que dio su nieta y que es la prueba clave contra el acusado.
Se trata de Marcos Cortez (33), quien se presentó en la comisaría primera de ese distrito y quedó detenido por la "tentativa de homicidio" de su pareja, Romina Soledad Olivera (27), que está internada en terapia intensiva.
El acusado fue conducido esta mañana ante la fiscal Amalia Belauzarán, negó haber cometido el hecho y dio otra versión de lo sucedido ese día, en una declaración indagatoria en la que fue asistido por un abogado particular, aseguraron fuentes judiciales.
Ahora, la fiscal tiene 15 días, prorrogables a un mes, para decidir si pide la prisión preventiva de Cortez, aunque una de las medidas que aguarda realizar es poder tomarle declaración a la víctima.
Teresa, madre de la chica, contó al canal Crónica TV que su hija sigue alojada en terapia intensiva de la clínica del Buen Pastor de Lomas del Mirador, donde se recupera de las quemaduras y le están realizando injertos de piel, por ejemplo en las manos.
Romina "tiene muy comprometidas las mamas, las axilas, los brazos, las manos", comentó la madre de la víctima, quien agregó que la joven se alimenta por sonda, pero come muy poco y está muy deprimida por lo sucedido.
El hecho ocurrió el 24 de marzo en una casa ubicada en 30 de octubre 3298, de José León Suárez, partido de San Martín, donde Olivera se hallaba con sus dos hijas, una bebita y otra de seis años.
Hasta allí llegó Cortez, de oficio plomero, con el cual mantenía una relación de mucha violencia y que incluía reiteradas separaciones y reencuentros, según pudieron determinar los investigadores.
Según relató la hija mayor de Olivera ante la Policía y luego a través del sistema de Cámara Gesell, el hombre llegó tras asistir a un cumpleaños de 15 y comenzó a golpear la puerta para ingresar, pero como Olivera se negaba, el hombre amenazó con matarla y ella accedió.
Una vez adentro de la casa, según la versión de la niña, el hombre agarró de los pelos a Romina, la golpeó contra una pared -lo cual le provocó la rotura de los dientes- y después la roció con alcohol y le prendió fuego.
Después de prenderla fuego, el agresor tiró a su pareja en la cama y la cubrió con una sábana, lo cual le provocó quemaduras en el 40 por ciento del cuerpo.
La nena de 6 años salió a pedir auxilio a los vecinos a los gritos y una ambulancia trasladó a la víctima al hospital Eva Perón de San Martín.
Teresa aseguró que su hija, pese a lo poco que puede hablar, le confirmó la misma versión que dio su nieta y que es la prueba clave contra el acusado.