Justicia Cero
Rodrigo Eguillor podría ser inimputable por una "aflicción psíquica"
El joven acusado de abusar sexualmente a una chica de 22 años en 2018, busca ser trasladado a una clínica privada. Lleva más de un año detenido en el penal de Ezeiza.
Rodrigo Eguillor, el joven que se encuentra detenido en el Penal de Ezeiza acusado de abusar sexualmente a una mujer de 22 años en 2018, volvió a ser noticia. Es que se conoció el que el 14 de enero pasado, la Sala de Feria de la Cámara de Casación del fuero correccional se reunió con los jueces Patricia Llerena, Gustavo Bruzzone y Pablo Jantus para decidir sobre Rodrigo Eguillor, preso en el penal de Ezeiza. Su defensa solicita su traslado a una clínica privada.
Debido a ese pedido, se le realizaron estudios y los especialistas llegaron a diferentes resultados. El primero, que se presentó el 2 de octubre del 2019, marcó que “las facultades mentales de Rodrigo Eguillor no encuadran dentro de los parámetros considerados como normales desde la perspectiva médico-legal; presenta una aflicción psíquica compatible con un trastorno”. Meses más tarde, un segundo informe reveló que el riesgo había desaparecido al iniciar un tratamiento psicológico.
El detenido finalmente fue trasladado al sector PRISMA ubicado en en Penal de Ezeiza, exclusivo para aquellos que comparten los problemas mencionados. Pero su defensa aún no está conforme, por eso, el abogado de Eguillor insistió a la Cámara de Casación con llevarlo a una clínica psiquiátrica privada, pero fue negado porque no reunía las condiciones de seguridad de un sistema penitenciario.
A pesar de la decisión tomada, el rumor de una "inimputabilidad sobreviniente” no está descartado en su totalidad, ya que se sugirió que los jueces del tribunal del caso analicen dar intervención a la Justicia civil para una eventual curatela.
Para repasar el caso, hay que recordar que el joven había sido visto forcejeando con la joven en el balcón de un edificio ubicado en San Telmo y, tras la denuncia de los vecinos al escuchar los gritos de la víctima, se conocieron una serie de hechos similares en su historial. Si bien recuperó su libertad por unas horas, luego se lo detuvo definitivamente, fue trasladado a la cárcel de Marcos Paz y terminó en el penal de Ezeiza.
Su comportamiento entre los internos no fue óptimo durante los primeros meses, dado que quedó en medio de grandes discusiones y peleas. En el último año, su defensa aseguró que Eguillor no reunía las condiciones psiquiatricas para permanecer en el mismo lugar que los demás, por eso, realizó un pedido de excarcelación.
Debido a ese pedido, se le realizaron estudios y los especialistas llegaron a diferentes resultados. El primero, que se presentó el 2 de octubre del 2019, marcó que “las facultades mentales de Rodrigo Eguillor no encuadran dentro de los parámetros considerados como normales desde la perspectiva médico-legal; presenta una aflicción psíquica compatible con un trastorno”. Meses más tarde, un segundo informe reveló que el riesgo había desaparecido al iniciar un tratamiento psicológico.
El detenido finalmente fue trasladado al sector PRISMA ubicado en en Penal de Ezeiza, exclusivo para aquellos que comparten los problemas mencionados. Pero su defensa aún no está conforme, por eso, el abogado de Eguillor insistió a la Cámara de Casación con llevarlo a una clínica psiquiátrica privada, pero fue negado porque no reunía las condiciones de seguridad de un sistema penitenciario.
A pesar de la decisión tomada, el rumor de una "inimputabilidad sobreviniente” no está descartado en su totalidad, ya que se sugirió que los jueces del tribunal del caso analicen dar intervención a la Justicia civil para una eventual curatela.
Para repasar el caso, hay que recordar que el joven había sido visto forcejeando con la joven en el balcón de un edificio ubicado en San Telmo y, tras la denuncia de los vecinos al escuchar los gritos de la víctima, se conocieron una serie de hechos similares en su historial. Si bien recuperó su libertad por unas horas, luego se lo detuvo definitivamente, fue trasladado a la cárcel de Marcos Paz y terminó en el penal de Ezeiza.
Su comportamiento entre los internos no fue óptimo durante los primeros meses, dado que quedó en medio de grandes discusiones y peleas. En el último año, su defensa aseguró que Eguillor no reunía las condiciones psiquiatricas para permanecer en el mismo lugar que los demás, por eso, realizó un pedido de excarcelación.
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