Rodolfo Barili: "No me pidieron nunca la entrada, hubo sobreventa y bengalas"
El director de noticias de Telefé Noticias, relató cómo fue su experiencia en el trágico recital del Indio Solari.
Rodolfo Barili es, además de periodista, fanático de "Los redonditos de ricota" y del Indio Solari. Conversó con Chiche Gelblung en Hola Chiche por radio Belgrano AM950 y contó cómo se vivió el recital en Olavarría en el que hay, al menos, dos personas muertas.
"Estaba a 30 ó 40 metros de la salida, no pasó jamás, no nos podíamos mover, estábamos rodeados de gente. La colmena tiene 18 hectáreas y aún a 30 metros de la salida salí con gente pegada", relató el periodista y continuó: "Si realmente vendieron 200 mil entradas por 800 pesos, es una fortuna incalculable. Yo voy con mis amigos a disfrutar canciones de cuando teníamos 15 años, íbamos a disfrutar".
Barili reconoció: "Se sabe que en el recital del Indio después de un par de tema te dejan entrar, mucha gente que no fue a Tandil fue a Olavarría porque podía ser el último recital" y contó cómo llegó al predio en el que se llevó a cabo el show: "Caminé 46 cuadras rodeado de gente. Sobrepasó todos los cálculos, pero a las cinco de la tarde lo pudiste ver, no generes una olla a presión con la gente. No existía forma humana de que nos pidieran entradas".
Respecto a la reacción del artista dijo que "El Indio se dio cuenta que algo pasaba y se puso a hacer temas tranquilos porque sabía que terminaba mal" y se refirió a la mala organización: "Había 15 torres y doce pantallas, en un predio de 18 hectáreas. No se veía nada. No se escuchaba nada. Hubo 1400 personas de seguridad, la misma cantidad de gente que en un superclásico".
El reconocido periodista explicó que "el predio no estaba mal para 200 mil personas. Pero sí para 300, 400 ó 500 mil. Además se inicio una configuración donde vos entrabas por la ruta y tenías que cruzar la ciudad. Mi hermana vive en Olavarría y supimos calcular el tiempo, pero había gente que salió apretujada como entró. La gente peregrinaba al hospital de la ciudad. Tengo conocidos de La Plata que volvieron con las costillas rotas por los codazos y eso no sale en ningún lado".
"Tenés la duda de cuando vendió la productora. Las versiones de los que decían que podías ir sin entradas porque todavía había. Las dudas de si quedaban o no entradas porque dijeron que se habían agotado", explicó Barili. "Jamás me pidieron la entrada. Y no fue porque me hayan reconocido: iba con gorra, anteojos y capucha para que no me reconozcan", expresó.
"El pibe de seguridad lo único que decía era 'tranquilos, ya llegaron, no corran' pero nunca nos pidió las entradas. Había dos carteles que mostraba donde estaba la salida trasera. Cuando la gente empezó a salir, como no estaba iluminado, se chocaban contra las tablas. Podría haber sido peor esto" dijo Rodolfo.
"Esto es el resumen de lo que somos como sociedad. Ni en pedo llevo a mis hijos, aunque me gustaría que vivieran lo que era el ritual de ir a verlo. Sin embargo, había carritos con bebés. Hubo bengalas, hubo sobreventa de entradas, hubo todo lo que no debía haber", concluyó el reconocido periodista.