RJ Mitte, protagonista de Breaking Bad, cuenta el suceso de la serie: "Lo que atrajo a los espectadores fue el realismo que mostramos"
Uno de los protagonistas de la exitosa serie estadounidense explica a ¡Arde Tele! las claves para haber transformado una buena historia en el último gran furor de la televisión.
Breaking Bad fue un hito que paralizó al mundo entero: 10,3 millones de personas presenciaron el último capítulo de la serie que ya entró (para muchos) en el Top 5 de las mejores de toda la historia.
Para algún desprevenido que todavía no la haya visto (¡vayan ya a descargarla!), trata sobre un profesor de química de clase media, que tiene que mantener a su familia con el escaso sueldo de la escuela y con un empleo de medio tiempo en un lavador de autos.
Su discreto mundo se derrumba al enterarse de que padece cáncer y tiene los días contados. Ahí hace el primer click: con un ex alumno empieza a cocinar y vender metanfetamina y, a lo largo de 62 episodios, queda en evidencia como la avaricia y la codicia transforman a una persona normal (Walter White), en el criminal más buscado del sur de Estados Unidos (Heisenberg).
Para comprender un poco más este fenómeno del que se hablará por años, ¡Arde Tele! se comunicó de manera exclusiva con uno de sus protagonistas, RJ Mitte (quien en la serie es el hijo del protagonista): "Creo que los dos factores que determinaron el éxito fueron el realismo que la serie le llevó a los espectadores y lo fácil que era relacionarse y entender a los personajes".
Con tan sólo 16 años, Mitte llegó al estrellato al protagonizar a Walter Jr., el incondicional compañero de ruta que padece una parálisis cerebral: "No fue difícil armar el personaje, porque desde chiquito convivo con una discapacidad similar a la de Jr. Creo que todo se basó en mi experiencia de vida, lo que me motivó y me dio fuerzas extra para hacerlo".
"Soy fan de Heisenberg, pero también me gustó mucho Saul Goodman. De todas formas, todos los personajes fueron únicos, de alguna u otra manera", agregó.
Con sólo recordar el caso de la serie Lost uno se da cuenta de lo importante que es el cierre de una historia que atrapó a todo el mundo. Por suerte las críticas del final fueron positivas (tranquilos, no vamos a revelarlo), lo que generó una sensación de satisfacción en los verdaderos protagonistas de esta historia.
"Al arrancar la última temporada teníamos una idea de cómo finalizaría, pero teníamos la ilusión de que siguiera, je. Tuvimos la fortuna de que el final fuera bueno, porque no todos son aceptados. Particularmente a mí me encantó, creo que fue muy apropiado".