Recomendados en Netflix: Amas de casa desesperadas
Si tenés ganas de engancharte con una serie "viejita", esta podría ser una buena opción.
Por Yamila El Hasi
@yamilaelhasi
yelhasi@diarioveloz.com
Cuando decidí que quería hacer la critica de una serie viejita para poder hablar de ella en esta columna, encontré que ésta: "Desperate Housewives" (Amas de casa desesperadas), podía ser la indicada. Si bien en algún momento había visto la serie en Sony y luego la representación argentina que solo duró una temporada, contra las ocho que tiene la entrega original, nunca me había puesto a seguirla. Hace unos meses me entregué a esta historia de cuatro amas de casa que, lejos de cumplir con un mandato social, rompen estructuras y salen de los clichés tradicionales, aunque claro, en el contexto del "sueño americano".
Esta comedia dramática y con varios tintes policiales que sorprenden y enganchan, se desarrolla en el ficticio barrio residencial de Fairview y la calle Wisteria Lane, es el epicentro de estas cuatro vecinas que se meten en situaciones cotidianas... y no tanto.
Crímenes, engaños, matrimonios, divorcios, historias de amor, niños que fueron creciendo a lo largo de la serie, muertes inesperadas de personajes queridos, violaciones y momentos felices son los ingredientes que hicieron que la historia se sostuviera en la pantalla desde 2004 hasta 2012, con algunos saltos temporales que si bien funcionaron como bisagra, presentan algunas fallas de continuidad y lógica. Pero tranquilos: esto solo se nota si desmenuzas cada episodio.
Desperate housewives, comienza con un suicidio, el de Mary Alice Young, que se vuela los sesos inesperadamente en su lujosa casa y sin que nadie pudiera prevenirlo. Mary Alice, era madre y claro, esposa. Pero además, era miembro de un grupo de amigas: Susan Mayer, interpretada por una brillante Teri Hatcher; Lynette Scavo, quien es en realidad Felicity Huffman y que fue la única en ganar un Emmy como Mejor actriz principal en una serie de comedia; Bree Van De Camp, es el alter ego de la altísima y elegante Marcia Cross y la bellísima Eva Longoria, le da vida a Gabrielle Solís, una modelo retirada que vive en los suburbios con su millonario marido.
A partir de la terrible decisión de Mary Alice, "las chicas" se unen aún más y la fallecida Young es la narradora de cada una de las aventuras y desventuras que les toca sortear a sus amigas. Una especie de fantasma reflexivo que cuenta poéticamente, con ironías y sarcasmos pero también con una sabia sensibilidad suprema que invita a la reflexión al final de algunos de los 180 capítulos.
La serie engancha, mucho. Es entretenida y jocosa, por momentos pasa de la profundidad a la frivolidad, pero es necesario para no deshidratarse en algunos momentos cruciales. Marc Cherry, su creador maneja a la perfección los golpes bajos y justo en ese momento que sentís que vas a romper en llanto, las lágrimas se quedan ahí: algunas suspendidas en el borde del parpado inferior y a veces, ruedan silenciosas por las mejillas.
Como toda obra, tiene algunas fallas que hacen que te quedes pensando cosas como: "¿Ya se le pasó?", "Pero ¿cómo puede vivir con esa carga?" o "¡Ah! Bueh...", pero en términos generales es realmente atractiva y la calidad de sus actores hace que se olviden rápidamente esas "cositas" y que por momentos sea inentendible la expresa resolución de un conflicto.
Cada quien al ver a estas Amas de casa desesperadas, seguramente se identificará con una o varias. Si bien las cuatro historias individuales son atractivas, quiero destacar la de Lynette Scavo con su marido Tom y la de Susan Mayer a través de lo que les toca atravesar. Sus personajes son adorables, fuertes, mujeres que luchan por lo que quieren. Sensibles y profundas así, al describirlas en estas líneas parecen parecidas, pero sin embargo, nada tienen en común. En lo personal, ellas me generaron una empatía y hasta les tomé cierto cariño.
Susan es torpe, divertida y espontanea. Lynette es la mujer que podría ser criticada por los movimientos feministas y a la vez aclamada de pie, al ser políticamente incorrecta. Ella es madre, por algún momento se olvida de ser mujer, pero siempre trata de mantener el equilibrio entre ser esposa, mamá y profesional.
Si bien la historia responde al famoso "American Dream" reitero, es interesante la critica que se le hace a una sociedad que aparenta ser perfecta y no puede estar más lejos de eso. De hecho, según cuentan Marc Cherry, creo esta serie cuando él y su madre estaban viendo un informe de noticias sobre Andrea Yates, una mujer que había ahogado a sus cinco hijos en la bañera, uno por uno, aparentemente por la psicosis que la había generado su depresión postparto (fuente Wikipedia). Lo curioso es que Cherry había sido el padre de varias series que no pasaron de una temporada, pero con Desperate Housewives, todo cambio: para cuando la cadena ABC transmitió el tercer capítulo, ya había conseguido firmar por una temporada completa que constó de 23 episodios. Por algo será.
Los mismos estadounidenses tenían la necesidad de salir a la luz como sociedad real. Cherry fue como una especie de vocero que dijo "Aquí no todo es perfecto". Y el público lo festejó.
Los personajes secundarios pueden ser realmente encantadores o extremadamente temibles y odiosos. Mike Delfino, Tom Scavo, Carlos Solís, la rompen. Pero mi preferida es Karen McClusckey, interpretada por la brillante Kathryn Joosten una ex enfermera que incursionó en el mundo de la actuación cuando tenía más de 40. Su vida, estuvo tan ligada al personaje de Karen que decidieron linkearla directamente con la serie, no puedo decir más. Intento no spoilerles nada.
Desesperate Housewives, puede que sea una serie para "minitas" pero deja un claro mensaje que siempre es válido sobre la amistad, el valor de la vida y los buenos vecinos. Pero sin olvidar que no importa el dinero que se tenga ni donde se viva, hay gente de todo tipo en todos lados y sobre todo, recuerda que hay que tener mucho cuidado con las apariencias, pues muchas veces engañan.
Tips: Despojarse de los prejuicios y entender la idiosincrasia estadounidense es muy importante para poder disfrutarla.