Rafael, el novio oculto de Nahir Galarza, cuyo testimonio es clave para el caso
El joven declarará la semana que viene en el juicio por el asesinato de Fernando Pastorizzo.
"Rafael es diez mil veces mejor que vos". Esas fueron las palabras que, según la última declaración de Nahir Galarza, desataron la última pelea que mantuvo con Fernando Pastorizzo horas antes de acribillarlo de dos balazos en la madrugada del 29 de diciembre. El joven en cuestión declara esta semana en el juicio como testigo. Por qué es importante su testimonio y a qué apunta la defensa de Nahir.
La noche del domingo 24 de enero, Nahir hizo una previa con tres amigas: Guillermina, Luciana y Sol Martínez; esta última ya declaró en el juicio y puso en jaque la defensa de Galarza. Esa noche, las chicas notaron que la confesa asesina tenía lastimados "los brazos y la pierna". "Le preguntamos qué le había pasado y nos dijo que Fernando le había pegado", reconoció Sol ante los jueces.
La noche siguió en el boliche Bikini, ubicado sobre la costanera de Gualeguaychú. Cerca de las dos y media de la mañana, Nahir y Fernando protagonizaron una fuerte pelea pública. ¿El motivo? "Nahir y Rafael se besaron", aportó Sol. En efecto, según la versión de Nahir, Fernando la increpó luego de verla "con otro".
"Los vi discutiendo, pero nunca lo vi a Fernando golpearla. Ella lo agarraba de los brazos y él del hombro. Me metí para separarlos y le pegué una trompada en el ojo derecho a Fernando. Le dije: 'Nunca más le pegues a una mujer'; porque Nahir nos había dicho esa noche que la había golpeado. Él se puso a llorar y a gritar. Me dijo que nunca le había pegado a una mujer y que no lo haría porque de chico había sufrido violencia", relató Sol.
"Nahir era de tener muchas relaciones, aunque Fernando era el chico al que llevaba a la casa. Sé que se veía con otros, aunque iba y venía con Fernando. El año pasado salió tres meses con uno de sus profesores de la facultad. También estuvo con Joaquín O.; de hecho ella me contó que tuvo un atraso en octubre y que si estaba embarazada era de él", reconstruyó Sol.
Rafael, que cumplió 19 años el dos de febrero, venía manteniendo encuentros casuales con Nahir desde hacía tres meses. El joven vive en Gualeguaychú y estudia Profesorado de Educación Física en la Universidad Autónoma de Entre Ríos. Es fanático del deporte, juega al hockey sobre césped en el club Neptunia y toca la guitarra.
Su testimonio permitirá saber un poco más de lo que sucedió la noche de Navidad en el boliche y determinar si, tal como intenta sostener Nahir, el tipo de relación que mantenía con la imputada era un noviazgo. El dato no es menor, la defensa de la joven busca probar que estaban de novios para derrumbar uno de los dos agravantes de su imputada: el vínculo.
La madrugada del 25, según le relató Fernando a sus amigos através de un crudo audio de WhatsApp en el que se lo puede escuchar llorar, Nahir y una de sus amigas lo agarraron y llevaron a la fuerza a la casa de los Galarza, que se ubica a dos cuadras del boliche. Allí, según la víctima, lo encerraron y le dieron una bestial paliza. Las últimas fotos del joven así lo confirman: tenía el rostro desfigurado.
El audio, que fue aportado al expediente por Agustín Ladner, uno de los amigos de Fernando, es contundente. Lo mandó a su grupo de amigos a las 8.46 de la mañana del 25. "Recién pude salir de la casa. Dice que yo la maltraté y yo nunca la toqué. Se me parte la cabeza mal. Me azotaron contra la pared como 45 mil millones de veces".