¿Quién es "el chino" de Graduados?
Chang Sung Kim, de 52 años, nació en Corea del Norte pero se crió en el Bajo Flores. Practicó artes marciales, pero dejó porque es "muy sensible".
Es conocido como el elocuente secretario de Clemente Falcini (Juan Leyrado), en Graduados, alcanzó la fama este año, la gente en la calle lo saluda y le demuestra cariño, pero su historia es compleja, larga y hasta graciosa: Chang Sung Kim, mucho más que "el chino de la tele".
Tampoco es chino, sino que nació en Corea del Sur hace 52 años, con dos matrimonios a cuestas y tres hijos, llegó a la Argentina cuando tenía sólo 7 años, pero antes de establecerse definitivamente en Buenos Aires, vivió en Brasil, aunque hoy se siente argentino en un 99 por ciento.
Su llegada a la Argentina no fue fácil, vino con sus padres y cuatro hermanos en un barco, en un interminable viaje de más de dos meses y medio, escapando de una difícil situación en su país natal: "No sabíamos no dónde quedaba la Argentina, yo la pasé bien porque para mí era una aventura, pero mis padres la pasaron muy mal".
Del Bajo Flores e hincha de Boca nunca se enamoró de una mujer oriental, siempre le gustaron las argentinas, por una cuestión de identificación: "Soy más argentino que el dulce de leche".
De golpe un día todos sus amigos empezaron a estudiar teatro y él, a pesar de creer que no era lo suyo, no quiso ser menos y cambió los rings de lucha de las artes marciales por los escenarios.
Durante años fue cinturón negro, casi se dedica a ello profesionalmente, hasta que se volvió más sensible y comenzó a cuestionarse eso de no mostrar debilidad y aguantar el dolor: "¡A mí me dolía! Soy muy sensible para las artes marciales".
Mientras estudiaba actuación lo convocaron para hacer "Gerente de Familia", con Arnaldo André, él dice que porque no hay muchos orientales que se dediquen al rubro, así pasó por "Floricienta", "Hombres de Honor", "Los Roldán", "22 el loco" y "Los simuladores", entre otros.
Le gusta su personaje en "Graduados" ya que en el reconoce muchos rasgos propios, sobre todo el hecho de que se trate de un "oriental argentino" un tipo de barrio y confiesa que aunque le costó de a poco aprendió a aprovechar sus rasgos orientales.
Anhela la ciudadanía argentina, que no puede conseguir a pesar de vivir en el territorio nacional hace más de 40 años y estar casado con una argentina: "Me siento de acá y la ciudadanía sería el broche de oro".
En lo laboral, tiene un sueño pendiente, un programa propio llamado "Los Kim" que cuente la historia de una familia coreana que vive en la argentina, cualquier semejanza con la realidad, es pura coincidencia.
Tampoco es chino, sino que nació en Corea del Sur hace 52 años, con dos matrimonios a cuestas y tres hijos, llegó a la Argentina cuando tenía sólo 7 años, pero antes de establecerse definitivamente en Buenos Aires, vivió en Brasil, aunque hoy se siente argentino en un 99 por ciento.
Su llegada a la Argentina no fue fácil, vino con sus padres y cuatro hermanos en un barco, en un interminable viaje de más de dos meses y medio, escapando de una difícil situación en su país natal: "No sabíamos no dónde quedaba la Argentina, yo la pasé bien porque para mí era una aventura, pero mis padres la pasaron muy mal".
Del Bajo Flores e hincha de Boca nunca se enamoró de una mujer oriental, siempre le gustaron las argentinas, por una cuestión de identificación: "Soy más argentino que el dulce de leche".
De golpe un día todos sus amigos empezaron a estudiar teatro y él, a pesar de creer que no era lo suyo, no quiso ser menos y cambió los rings de lucha de las artes marciales por los escenarios.
Durante años fue cinturón negro, casi se dedica a ello profesionalmente, hasta que se volvió más sensible y comenzó a cuestionarse eso de no mostrar debilidad y aguantar el dolor: "¡A mí me dolía! Soy muy sensible para las artes marciales".
Mientras estudiaba actuación lo convocaron para hacer "Gerente de Familia", con Arnaldo André, él dice que porque no hay muchos orientales que se dediquen al rubro, así pasó por "Floricienta", "Hombres de Honor", "Los Roldán", "22 el loco" y "Los simuladores", entre otros.
Le gusta su personaje en "Graduados" ya que en el reconoce muchos rasgos propios, sobre todo el hecho de que se trate de un "oriental argentino" un tipo de barrio y confiesa que aunque le costó de a poco aprendió a aprovechar sus rasgos orientales.
Anhela la ciudadanía argentina, que no puede conseguir a pesar de vivir en el territorio nacional hace más de 40 años y estar casado con una argentina: "Me siento de acá y la ciudadanía sería el broche de oro".
En lo laboral, tiene un sueño pendiente, un programa propio llamado "Los Kim" que cuente la historia de una familia coreana que vive en la argentina, cualquier semejanza con la realidad, es pura coincidencia.